En medio de un recrudecimiento de la violencia en Rosario y la tensión en el Ministerio Público de la Acusación (MPA) con un fiscal acusado por un colega, este miércoles se llevó a cabo en la ciudad un encuentro clave de la transición entre el ministro de Seguridad del gobierno saliente de Omar Perotti, Claudio Brilloni, y su posible sucesor en el equipo de Maximiliano Pullaro, Pablo Coccocioni. Tras el encuentro, los dos referentes coincidieron en la buena predisposición del otro.
Como «bueno y positivo» calificaron desde los equipos de Pullaro y Perotti el diálogo, enfocado en agilizar el proceso de transición y garantizar que se realice de manera ordenada y prolija. Coccocioni destacó: «No vinimos con la idea de hacer un juicio de valor de la gestión».
El encuentro abordó una serie de temas cruciales para la seguridad en la provincia, incluyendo la situación y el estado de los efectivos policiales, la flota de vehículos, la población reclusa y el servicio penitenciario, así como el estado de las obras públicas en curso.
Sobre el repunte de la violencia en Rosario en las últimas semanas, los equipos de Pullaro manifestaron que, si bien estos temas están siempre presentes, el enfoque principal fue sobre los aspectos estructurales de la gestión y los recursos disponibles para diciembre.
Desde la sede de Gobierno en Rosario, Brilloni expresó su satisfacción por el encuentro y resaltó la importancia de una entrega ordenada y prolija para permitir que la nueva gestión comience con fuerza. Señaló que se trataron «temas genéricos» y que se recibieron algunas inquietudes por parte de los equipos de Pullaro, que serán objeto de preparación en el período de transición.
