Oscar Ramón «King Kong» Cardozo, de 52 años, era un conocido narco de nacionalidad paraguaya que llevó adelante gran parte de su carrera delictiva en nuestro país. En su última andanza vinculada al transporte de 4 toneladas de marihuana fue detenido en el sur argentino y condenado a 9 años de cárcel por la Justicia federal. A finales de junio cuando estaba por terminar el cumplimiento de la sentencia, fue extraditado a Paraguay donde tenía una causa pendiente por homicidio cometido en 2011. Le dieron un arresto domiciliario y este domingo fue asesinado de un disparo en la sien al salir de una carrera clandestina de caballos en Cambyretá, frente a la capital misionera de Posadas.
En marzo de 2006 fue detenido en una estancia de la localidad bonaerense de Abbot, acusado de coordinar un transporte de 380 kilogramos de marihuana hacia Buenos Aires. En la investigación estaba sindicado como quien recibía la droga para luego distribuirla en nuestro país y en esa estancia descubrieron una pista clandestina. En ese momento, quedó alojado en la Alcaidía de Reconquista, en Santa Fe, pero escapó caminando. Las versiones que circularon por ese tiempo dieron cuenta que la connivencia policial le salió 30 mil dólares. Esa fuga fue un escándalo y derivó en el desplazamiento de la cúpula policial.
Fue sentenciado y luego de pagar su condena volvió a su país, allí quedó involucrado en un homicidio cometido en 2011 donde, según la acusación, mató en medio de una pelea a un vecino identificado como Emérito Acuña Aguirre en la localidad de Yatytay, de dónde era oriundo y distante a pocos kilómetros de Encarnación, y se vino a nuestro país. Con un nombre falso siguió cometiendo delitos, de acuerdo a las causas de la Justicia federal.
En junio de 2016 quedó vinculado a otra investigación por tráfico de marihuana vinculada a un camión que las fuerzas federales secuestraron en una propiedad en la localidad de Virrey del Pino en la provincia de Buenos Aires, encontraron algo más de 4 mil kilos de marihuana prensada.
A la altura del kilómetro 47 de la ruta nacional 3 detectaron al transportista y montaron un operativo para atraparlo. Los uniformados de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) llegaron a un galpón y cuando irrumpieron una camioneta aceleró y pasó a la par de los policías a los tiros. Los pesquisas determinaron que en el vehículo iba el jefe de la banda: King Kong.
En febrero de 2017 lo detuvieron en el sur del país, más precisamente en la localidad de Catriel, provincia de Río Negro. Se había cambiado la identidad por la de Eleuterio Martínez. Y así King Kong fue condenado a 9 años de cárcel por el transporte de las 4 toneladas de marihuana encontradas en Virrey del Pino.
La Unidad Penal federal de Ezeiza fue el lugar donde purgó condena y cuando estaba por terminar su sanción pidió irse a Paraguay. Ahí tenía un pedido de captura por el crimen de Emérito Acuña Aguirre, de octubre de 2011, así que al ser extraditado la madrugada del 25 de junio pasado donde llegó en un vuelo de Aerolíneas Argentinas al aeropuerto Silvio Pettirossi de Luque, escoltado por personal de Interpol. A pisar tierra paraguaya fue al juzgado donde se tramitó dicha causa y obtuvo una prisión domiciliaria.
Este domingo 4 de julio pasadas las 17, King Kong no respetó la orden judicial y se fue con un allegado a ver una carrera de caballos clandestina en la localidad de Cambyretá, ubicada a pocos kilómetros de Posadas, provincia de Misiones.
Cuando regresaba a su casa en la camioneta Kia Sorrento de acompañante, un grupo de gatilleros dispararon más de una decena de veces contra la camioneta y King Kong recibió un certero disparo en la sien derecha y murió casi en el acto. El conductor salió a la carrera y a las horas se entregó en la comisaría local.
Por el hecho hay dos hombres detenidos, Ronny A. B. y ALejandro A. O. a quienes sindican a un grupo delictivo brasilero. Para los investigadores estiman que el primero de ellos podría estar vinculado al crimen del intendente paraguayo asesinado en mayo pasado José Carlos Acevedo.