El papa Francisco les pidió a los directores mundiales de Scholas Occurrentes, los argentinos José María del Corral y Enrique Palmeyro, que no «se dejen abatir por quienes con otros intereses buscan desplazarlos» y ratificó su continuidad al frente de la fundación pontificia, nacida en Buenos Aires y extendida por el mundo para difundir el ideario educativo del pontífice.
El texto de la misiva implica un respaldo papal tras la polémica por la frustrada donación de $16 millones del gobierno de Mauricio Macri a la fundación y las denuncias periodísticas sobre supuestos manejos irregulares de dinero y de uso de la imagen del Papa.
«Queridos José y Quique: gracias por el informe de gestión y auditoría presentados y felicitaciones por el trabajo de integración y compromiso ciudadano que acaban de realizar en Puerto Príncipe, Haití y en la Villa 31 de Argentina. En este tipo de cosas se ve el carisma de Scholas y la necesidad que tiene hoy día la juventud de una intuición educativa de este calibre», comienza el texto.
Y a continuación escribe: «No se dejen abatir por quienes con otros intereses buscan desplazarlos o cambiar la esencia y misión de Scholas».
«Sé que para ustedes y todo el equipo es un esfuerzo inmenso llevarla adelante, pero también sé que los frutos logrados en los jóvenes son grandes y también sé que es quizá una gran respuesta a la crisis educativa en esta cultura del descarte», agrega el pontífice.
Al igual que en el texto anterior, Francisco volvió a señalar que «la mística de Scholas entraña servicio y gratitud» y, en ese línea, agradeció a «todas las empresas e instituciones que los están ayudando para llegar con esta esperanzadora propuesta a todos los jóvenes del mundo».
«También (quiero) extender mi gratitud a los referentes de las Iglesias locales y de otras confesiones religiosas por ser parte de esta iniciativa multicultural y a los gobiernos por abrir las puertas de las escuelas y transformar así estas acciones aisladas en políticas de estado que recuperan el pacto educativo», agregó.