El papa Francisco reclamó este domingo que se cumplan los pedidos de cuarentena de los gobiernos «por el bien de todos nosotros», al tiempo que llamó a rezar «por los hombres y mujeres que mueren solos» por la pandemia de coronavirus y anunció la convocatoria a dos jornadas mundiales de oración para esta semana.
«Expreso nuestra cercanía a médicos, trabajadores de la salud, voluntarios, a las autoridades que deben tomar medidas duras pero por nuestro bien», dijo Jorge Bergoglio al recitar el tradicional Ángelus, televisado en streaming tras el cierre de la Plaza San Pedro como medida para frenar la propagación del Covid-19.
En ese marco, el pontífice expresó su apoyo «a los policías y soldados que en la calle buscan mantener el orden y que se cumplan las cosas que el gobierno nos pide hacer por el bien de todos nosotros».
Durante el Ángelus, Francisco convocó a los fieles del mundo para que recen el padre nuestro» el próximo 25 de marzo al mediodía, para mostrar la «universalización» de la oración para luchar contra la pandemia del coronavirus.
Además, el pontífice anunció que el próximo viernes a las 18 hora local (14 de Argentina) rezará en soledad «desde la Plaza San Pedro vacía», un momento de oración mundial tras el que impartirá vía streaming la bendición Urbi et Orbi (a Roma y el mundo), usualmente reservada para Pascua, Navidad y Año Nuevo
«En estos días, escuchamos las noticias de muchos difuntos víctimas del Covid 19: hombres, mujeres que mueren solos, sin poder despedirse de sus seres queridos», había planteado este domingo por la mañana el Papa en su misa dominical en la residencia de Casa Santa Marta.
«Pensamos en ellos y rezamos por ellos. Pero también por las familias, que no pueden acompañar a sus seres queridos en su fallecimiento. Nuestra oración especial es para los difuntos y sus familias»; agregó.
La celebración en la capilla de la residencia papal se retransmite en directo desde el 9 de marzo por decisión de Francisco, que quiere mostrar así su cercanía a los fieles que no pueden asistir a la misa a causa de la pandemia de coronavirus.