Por: Gastón Marote/NA
Leandro Cortez Pastrana, más conocido como «El Pelado Nicanor» fue un asesino serial que mató a tres personas en Mendoza durante 2018 y otras dos en 2016, aunque de estas últimas fue sobreseído. La excusa de Cortez para cometer estos homicidios fue que las víctimas le debían dinero.
A pesar de cargar con tres asesinatos y profugarse, la Justicia mendocina solo lo condenó a 16 años de prisión en un juicio abreviado. Cortez Pastrana, antes de cometer estos crímenes era ladrón y narco.
En noviembre de 2016, a los 23 años, su nombre quedó vinculado por primera vez a dos crímenes y ello lo llevó a la cárcel, porque hasta ese momento arrastraba antecedentes por tenencia ilegal de arma y violencia de género, pero jamás había pisado una celda. Estuvo durante ocho meses en el penal mendocino de Boulogne Sur hasta que fue liberado en julio de 2017.
El 10 de febrero se produjeron dos de los tres homicidios en serie que cometió «el Pelado Nicanor». Carlos Martínez y Mauricio Quiroz vivían en un loteo ubicado en Las Heras y habían salido hacia un puesto para faenar un lechón.
Martínez fue hallado asesinado de cinco balazos en un cauce de agua ubicado en una planta de residuos en El Borbollón, mientras que Quiroz apareció muerto una semana después con ocho disparos.
Estos dos crímenes alertaron a la Policía y Cortez Pastrana fue sindicado como el sospechosos de ambos homicidios y la hipótesis principal por ambos hechos era que las víctimas tenían una deuda por compra de drogas.
Justamente, apuntaron contra «el Pelado Nicanor» y lo señalaron como el presunto encargado de cobrarle a los deudores, pero al no usar teléfono celular ni redes sociales, era una persona difícil de contactar para la Policía.
El 24 de julio del mismo año este sujeto volvió a atacar tras matar a un hombre y dejar herido a otro.
Jorge Saldívar y Franco Guíñez realizaban trabajos de albañilería en un puesto del barrio Puesta del Sol, cuando en el lugar se escucharon numerosos disparos. Guíñez fue llevado a un hospital cercano a la comisaría 40 del barrio mendocino La Estanzuela.
La víctima le relató a los policías que lo entrevistaron que había sido atacado a disparos por un sujeto y que otra persona también había sido herida.
Los efectivos fueron al lugar de los hechos y hallaron muerto a Saldívar, quien tenía al menos siete balazos en el tórax, brazo, hombro y espalda.
Otra vez Cortez Pastrana, quien estaba prófugo de los otros dos homicidios, fue señalado como el sospechoso de este ataque, porque tenía problemas de vieja data con las víctimas.
El asesino serial sabía que tenía a los investigadores muy cerca, por lo que decidió escapar a San Juan, donde halló una casa para mantenerse oculto hasta que la investigación se enfriara.
Sin embargo, sus cálculos fallaron porque el 12 de octubre de 2018, en un operativo conjunto entre la Policía de Mendoza y la de San Juan resultó detenido.
«El Pelado Nicanor» confesó los tres últimos homicidios y en agosto de 2019 fue condenado a 16 años de prisión en un juicio abreviado, acordado por el fiscal Gustavo Pirrello y el defensor oficial del recluso, Franco Fausti.
La cantidad de años establecido también contó con la aprobación de la abogada querellante de dos de los asesinados, Jimena Villanueva, por lo que la jueza Cristina Pietrasanta, del Tribunal Penal Colegiado número 1, confirmó el fallo ante las partes.