El petróleo, una materia prima clave para la economía global, anota un promedio de 56 dólares por barril WTI en 2015, muy por debajo de los 99 dólares que marcó en 2014. El crudo estadounidense había tocado los 116 dólares por barril en junio de 2014, pero desde entonces no ha dejado de caer hasta tocar los 45 dólares de la tercera semana de octubre.
“Se cumplen ya 11 meses desde que el barril de crudo quebró la barrera de los 70 dólares para ya no volver atrás. Desde enero de este año, el mercado mostró una mayor volatilidad, con un precio que se movió en una banda entre 67 y 43 dólares”, mencionó un documento del Ieral elaborado por la investigadora Eliana Miranda.
El documento señaló que la caída por debajo de los 70 dólares marcó un punto de inflexión para la producción de crudo norteamericana. En gran parte del segundo semestre de 2014, había 1.600 equipos de perforación activos, mientras que en mayo de 2015 esa cifra se redujo a 700.
“Los precios en torno a los 100 dólares el barril viabilizaron la revolución tecnológica norteamericana, y su producción creció un 72 por ciento en sólo seis años”, consignó el Ieral. Y completó que, con una tasa de crecimiento anual acumulativa de 9,4 por ciento, contra 1,1 por ciento de la producción mundial, Estados Unidos ganó market share, al pasar del 8 por ciento de la producción mundial en 2008 a 13 por ciento en 2014. Precisamente el año pasado, Estados Unidos desplazó a Arabia Saudita como primer productor mundial.
El Ieral mencionó que el precio es un factor clave para la producción de crudo en los Estados Unidos, porque las decisiones son tomadas de manera descentralizada por muchas empresas, mientras sus principales competidores toman las decisiones de producción en forma más centralizada.
De cara al futuro, el Ieral pronosticó volatilidad en el corto plazo. “En el movimiento de los precios tendrán fuerte incidencia las cuestiones macroeconómicas, como la evolución de la economía china en particular y de la economía global, por su impacto sobre la demanda de petróleo”, diagnosticó.
Otros factores a tener en cuenta son las noticias relativas a la producción y almacenamiento del petróleo, y la evolución de los mercados financieros y del dólar.
Por el lado de la demanda, el documento del Ieral advirtió que las proyecciones para la economía mundial prevén un crecimiento en torno al 3,6 por ciento en 2016 frente a un 3,1 por ciento proyectado para 2015.
El Ieral completó que, por el lado de la oferta, algunos países aumentaron su producción durante 2015 –Irak, Arabia Saudita, Brasil y Rusia, entre otros– mientras que Estados Unidos ralentizó su marcha. Arabia Saudita avanza y gana nuevos mercados.
“En 2016, además, se sumarán las exportaciones de Irán, una vez que se levanten hacia fines de este año las sanciones impuestas en el pasado por Estados Unidos y la Unión Europea”, completó el informe. Y finalizó con que, en este contexto, parece difícil que eventuales cortes de producción en algún o algunos países no puedan ser cubiertos con una mayor oferta de otros.