La faena de carne aumentó 20% en los últimos doce meses por la sequía, lo que creó una sobreoferta de carne en el mercado interno que impide que los precios se adecuen a la inflación, según un informe de los frigoríficos enrolados en CICCRA.
Pero esa situación se revertirá para octubre, luego de llegado el fenómeno climático de «el niño», que producirá la retención de animales en los establecimientos productores.
«Esta retención reducirá drásticamente la oferta de carne en el mercado interno, por lo que los precios sufrirán fuertes aumentos, que estamos estimando en un 40%», indicó el informe sectorial.
La faena de hacienda vacuna totalizó 1,314 millones de cabezas en el sexto mes del año, y se convirtió en la tercera más elevada de la historia.
Sólo en junio de 2009 y junio de 1981 se faenaron más animales que en el último mes.
La faena de machos ascendió a 679,7 mil cabezas en junio de 2023, lo que arrojó un crecimiento de 11,6% interanual.
Por su parte, en junio se faenaron 634,1 mil hembras, es decir 18,7% más que en junio del año pasado. Se registraron importantes incrementos interanuales tanto en la faena de vaquillonas como de vacas.
El mayor dinamismo de la faena de hembras con relación a la de machos se tradujo en una participación de las hembras en la faena total equivalente a 48,3% en junio de 2023.
Ya se cumplieron tres meses consecutivos con una participación de las hembras mayor al límite superior del intervalo que resulta consistente con el sostenimiento del rodeo vacuno, aunque aún no podemos hablar de liquidación de stock.
El ratio hembras/faena total subió a 47,4% en el primer semestre de 2023 (+1,3 puntos porcentuales interanuales), ubicándose por encima del límite superior del intervalo consistente con el mantenimiento del rodeo vacuno, producto de la intensa seca que afectó a las principales zonas productoras del país en el último año y también de la suba real de los precios de los granos durante gran parte de 2022.
En lo que respecta a la producción de carne vacuna, durante junio de 2023 la combinación de 1,314 millones de animales faenados y un peso en gancho de 226 kilos, generó un total de 297 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h) de carne vacuna.
Al considerar los primeros seis meses de 2023, la producción de carne vacuna fue equivalente a 1,656 millones de tn r/c/h, lo que arrojó un crecimiento de 10,3% interanual.
Estimando exportaciones de carne vacuna por 90 mil tn r/c/h equivalentes durante junio pasado, en la primera mitad del año se habrían exportado 480,2 mil tn r/c/h de carne vacuna (+12,3%; +52,5 mil tn r/c/h).
En consecuencia, al mercado interno argentino se habrían volcado 1,176 millones de tn r/c/h de carne vacuna, lo que implica que el consumo interno habría absorbido un volumen 9,5% mayor al de enero-junio del año pasado (+101,7 mil tn r/c/h).
En junio de 2023 el promedio móvil de los últimos doce meses del consumo aparente de carne vacuna se ubicó en 50,8 kg/hab/año, superando en 4,7% el nivel registrado en junio de 2022 (+2,3 kg/hab/año).
No obstante, el incremento de la producción de carne vacuna asociado a la mayor faena forzada por la sequía del último año, el consumo per cápita de carne vacuna actual todavía resultó 4% menor al registrado en el primer semestre de 2019.
En el Gran Buenos Aires, el nivel general de precios al consumidor registró un incremento de 5,8% mensual, llegando la suba acumulada en el último año a 117%.
En el caso particular de los cortes vacunos, en el último mes el alza promedio de los cinco cortes relevados por el organismo oficial de estadísticas fue de sólo 0,9%, quedando el incremento de los últimos doce meses en 72,7% y la brecha entre el ritmo de aumento del precio promedio de los cortes vacunos y del nivel general del IPC en 20,4%.
Por lo tanto, en los últimos doce meses el precio promedio de los cortes de carne vacuna analizados cayó 20,6% en relación al IPC nivel general.
En tanto, con respecto al valor del pollo entero, los cortes vacunos tuvieron un descenso de precio de 10,6%.
Estos guarismos son consistentes con la recuperación que mostró el consumo aparente de carne vacuna en los últimos doce meses.