El presidente Alberto Fernández despidió este mediodía los restos de Diego Armando Maradona, que desde las primeras horas de esta mañana son velados en la Casa Rosada, ante un incesante tránsito de decenas de miles de personas que le rinden homenaje al ídolo.
Cuando llegó frente al ataúd y visiblemente conmovido, el mandatario colocó sobre él una camiseta de Argentinos Juniors y dos pañuelos blancos, símbolo de la lucha de los organismos de derechos humanos, mientras que la primera dama llevó un ramo de rosas rojas.
Fernández -junto a Yañez; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello; y el vocero Juan Pablo Biondi; permaneció durante varios minutos en silencio frente al féretro, mientras continuaba el incesante ingreso de personas para darle el último adiós al astro.
El mandatario llegó a las 10.55 en helicóptero desde la residencia de Olivos, acompañado por Yañez; Biondi y Vitobello.
Antes de ingresar a la Casa Rosada, Fernández se acercó al vallado a saludar y sacarse selfies con grupos de personas que se encontraban apostadas en el lugar.
El Presidente fue recibido por el jefe de Gabinete en el Salón de los Bustos, e inmediatamente se dirigió a saludar a la familia Maradona.