Search

El productor argentino Jorge Edelstein habló de “Cielo Grande” la serie que llega a Netflix

“Es fundamental actualizarse para hablarle a los jóvenes”, dijo quien supo estar a cargo de programas como “Violetta” y “Soy Luna” que espera repetir esos éxitos con un elenco internacional de jóvenes conformado por Pilar Pascual, Abril Di Yorio, Victor Varona y Thaís Rippel

El productor argentino Jorge Edelstein, creador de éxitos juveniles como Violetta, Soy Luna y Entrelazados que estrenará este jueves en Netflix la tira Cielo Grande, aseguró que para hablarle a los jóvenes hoy “es fundamental actualizarse para que lo que uno haga siga siendo relevante”.

“Estudio constantemente, me hice fan de Tik Tok cuando empezó a ser tendencia para ver de qué iba y también tengo jóvenes en mis equipos para que me digan «esto es cringe y no funciona»”, explicó Jorge Edelstein a Télam, autor de tiras como O11ce y Junior Express, sobre los desafíos que imponen audiencias cada vez más exigentes.

Con esa premisa creó Cielo Grande, la serie protagonizada por un elenco internacional de jóvenes conformado por Pilar Pascual (Go! Vive a tu manera), Abril Di Yorio (1-5/18), Victor Varona, Thaís Rippel (Simona), entre otros, que trabajan para salvar un hotel antiguo en el Delta argentino.

Emocionada por el estreno, Di Yorio, la actriz que interpretará a Luz, la protagonista de Cielo grande resaltó que “en la tira las historias están abordadas desde un lugar más realista, contemporáneas, sin fantasías”.

“Mi personaje -agregó- es el corazón de este hotel al que fui toda mi vida, que ahora está quedado en el tiempo y como mi sueño es revivirlo me voy a organizar con mis amigos y mi familia para volver a darle luz”.

Por su parte, Pilar Pascual, que se cuidó de no adelantar nada relevante de la trama, adelantó que encarnará a Estefi “una wakeboarder internacional, campeona de muchas competencias, que descubre que su padre esconde un secreto en Cielo grande y quiere averiguar qué pasa ahí”.

Dice Edelstein que el puntapié de esta tira filmada íntegramente en Argentina y que promete un cocktail de “misterio, secretos familiares, recuerdos de infancia, wakeboard, amor y música” fue un viaje de mochilero en Europa: “Hace muchos años, en el típico viaje de mochilero por Europa, tomé un ferry a una isla camino a Grecia y encontré un hostel atendido por gente joven, donde había diversidad de culturas, camaradería, con un espíritu alucinante y ese fue el start up inspiracional”.

En ese lugar, dijo, había “gente que iba a pasarla bien, otra que trabajaba pero se divertía, y quería armar algo donde, dentro de la narrativa, estuviera justificada esta diversidad que, muchas veces, se vuelve un poco forzada, no ocurre orgánicamente”.

Para armar sus historias Edelstein lleva adelante lo que llamó el “cartoneo de experiencias”. “Lo del «cartonero» lo dice Mauricio Kartun, que es un dramaturgo buenísimo y dice que él «cartonea» cosas que a nadie le sirven. En este caso, me fui de vacaciones y la pasé bien, es un momento que rescaté, resignifique y lo usé como inspiración de una narrativa. Sin eso la narrativa está hueca y son propuestas de marketing o efectistas que no tienen vínculo con la realidad ni emocionan”, explicó.

Según el realizador esta es una historia que “cruza deseos, búsquedas y motivaciones en una edad muy particular”. Y agregó: “En mi adolescencia era súper importante no solo encontrar lo que te gustaba sino empujar para que eso sucediera y tener la resiliencia para lograrlo. Es el tema que está abajo de todo, el subtexto”.

En Cielo Grande los protagonistas intentan poner en pie un viejo hotel que supo tener su esplendor y en Entrelazados, la serie de Disney, el foco está puesto en viajar al pasado. Consultado sobre cómo ve la relación que los jóvenes tienen con el pasado, analizó: “Yo tenía un teléfono de disco y hace unos años, un amigo de mi hijo que tenía 15 años, me pidió llamar a su casa y cuando agarró el aparato me preguntó: «¿y esto cómo se usa?». Me pareció espectacular porque todos estamos todo el tiempo sorprendidos por el pasado, hay una especie de cartoneo del pasado, que a uno le genera curiosidad, y lo traigo a la serie porque me resuena, tiene emocionalidad, y encapsulado en una historia, se transmite a la audiencia”.

Además Edelstein analizó la actualidad de los programas para jóvenes. “Lo que empezó a pasar en esta era donde la información está disponible y todo es instantáneo, es que un chico de 9 años ve Stranger Things y su expectativa narrativa ya no es la de una serie para chicos: esperan a ver tramas súper complejas, esperan mucho de la series. Es un desafío cada vez más grande contar historias que atrapen porque tenés que trabajarlas con mucho detalle y brainstorming, con una complejidad extra: tienen que ser historias aptas para todo público. Por eso las historias en Cielo Grande apuntan a generar equipamiento para la vida, dejarle algo al que la ve, sin hacer una bajada de línea que no atrapa ni interesa”, apuntó. Y sobre la importancia que tienen este tipo de contenidos en la competencia entre plataformas dijo: “Todos compiten por la atención y me parece que el juego es mucho más grande que el contenido específico de la plataforma. En ese contexto, los contenidos juveniles tienen un lugar importante porque los chicos traccionan mucho y son decisores más direccionados, a diferencia de los adultos, pero nada más”.

10