Ariel Wolman, Noticias Argentinas
Cada mañana, alrededor de las 9, la empresa Kanta Ibope envía la planilla de ratings de los canales de televisión abierta. Son los promedios consolidados, porque los productores de los distintos programas fueron siguiendo las mediciones minuto a minuto, así que -salvo raras excepciones- de alguna manera ya tenían una idea de cómo les fue el día anterior. Como se sabe, de esos números depende muchas veces la continuidad o no de un ciclo y la de sus trabajadores. Va bien: Seguimos; está flojo: Vamos a tener que cambiar cosas, va mal: Dios nos ayude. Cruel, pero real. Claro que hay proyectos a los que se les tiene más paciencia que a otros, pero en líneas generales el negocio es así, como en cualquier industria o comercio.
Sin embargo, hoy hay otras variables que se tienen en cuenta, porque la gente ya no mira la televisión como antes, que tenía que sentarse a una hora específica para ver su programa favorito. Hoy, si una persona no llega a tiempo, tiene la posibilidad de buscarlo en uno de los tantos streamings que hay, ya sea en su cableoperador o inclusive en YouTube. Esto quiere decir que, además del público que ve un programa “en vivo”, hay otro que quizás lo vea en otro momento. Y ahí el rating entonces falla si solo se tiene en cuenta a los primeros.
Otro de los puntos a tener en cuenta también es qué genera un programa en la gente, en su público. ¿Pasa desapercibido?, ¿es solo una compañía de fondo mientras uno hace otra cosa?, ¿genera debate?, ¿marca agenda en la opinión pública? Porque si un ciclo crea interacción en el público y este se ve reflejado en las redes sociales, por ejemplo, aumenta considerablemente su valor. Demuestra que es un programa que está vivo, más allá de que lo diga un people meter (el aparatito que suele medir el rating).
Esta interacción suele llamarse en marketing con el término “Engagement” y es empleado por las empresas de todos los rubros que, desde hace un tiempo, evalúan el nivel de compromiso que tienen los consumidores y usuarios con sus marcas. Por esto, la misma empresa que se encarga de los ratings de radio y tv en nuestro país, que también trabaja en otros tantos como Brasil y Estados Unidos, comenzó hace un tiempo a relevar y clasificar mediante inteligencia artificial todas las menciones y comentarios que hay, de los programas, en Twitter, Facebook, Instagram, Reddit, Blogs y portales de noticias. ¿Y entonces? ¿cuáles son los ciclos con mayor engagement de la Argentina?
La última medición informada hasta el momento por Kantar Ibope, sobre TV abierta, es del 22 al 28 de mayo. Y en primer lugar se ubicó LAM, el programa que conduce Ángel de Brito. Este es un claro ejemplo de lo mencionado anteriormente, este ciclo es cada día el más visto de América, pero está lejos de los mejores ratings de Telefe, sin embargo, es el que más “rebote” tiene en las redes. En segundo puesto, muy lejos del primero, quedó Masterchef que es la gran apuesta del prime time del canal líder. Tercero estuvo Telefe Noticias, en el cuarto ATAV 2 y en el quinto Intrusos.
Cabe aclarar que tener menciones no es sinónimo de calidad o de que al público le encanta lo que comenta en las redes, muchas veces un tema se convierte en tendencia por un hecho inesperado. Por ejemplo, en los últimos días la novela de eltrece, que suele generar mucho debate por su temática, sumó muchos comentarios por la polémica de los cortes de algunas de sus escenas. Pero esto puede durar un tiempo corto, la mayoría de los ciclos que aparecen primeros en la lista con mayor engagement suelen ser los mismos y es por su contenido.
Dentro de los primeros 15 puestos aparecen, por orden, Los 8 escalones de los 3 millones, Cortá por Lozano, Pasaplatos, Socios del espectáculo, Bendita, Desayuno Americano, A la tarde, Telenueve, Cocineros Argentinos y A la Barbarossa. Esto significa que, a excepción de Argentina Tierra de amor y Venganza 2 -cuyo caso ya fue mencionado-, la gente opina mayormente de los temas periodísticos, de los programas de cocina y un poco de los juegos de Guido Kaczka.
La tecnología nos permite hoy por hoy medir, evaluar, analizar, contar, comparar, revisar. Es cierto que muchas veces genera stress y le quita naturalidad a la creatividad, porque muchas cosas se terminan haciendo por encargo, porque es lo que le gusta a la gente o lo que creemos que va a interesar. Pero contar cada día con más herramientas nos permitirá saber qué es lo que nos funciona y qué no, qué podemos mejorar, por dónde podemos crecer. Y eso, le aseguro, no es poco.