“Un referendum tiene que determinar la situación del Sahara Occidental. El pueblo saharaui quiere la independencia y la integración. Todos los años están esperando que Naciones Unidas pueda resolver la situación. Están cansados y los jóvenes están presionando a los dirigentes para lograr una salida militar”, expresó Néstor Suleiman, el referente de la Federación de Entidades Argentino Árabes (Fearab) quien, embanderado con la causa independentista de los saharauis, realizó un segundo viaje al noroeste de África, en esta oportunidad a Mauritania, para observar en primera persona cómo es la situación de ese pueblo que fue expulsado de su tierra y vive parte en campamentos de refugiados en Argelia, parte en el exilio mauritano o en una diáspora por la región.
Entre sus principales reflexiones, el secretario general de las entidades árabes confió que la parte joven de ese pueblo es la que tiene más ansias de recobrar su territorio y que está cansado de las vías diplomáticas. Mientras tanto, en primer término lo que reclama el Frente Popular de Liberación de Saguía el Hamra y Río de Oro –más conocido como el Frente Polisario– junto al gobierno de la República Árabe Saharaui Democrática, dirigido por Mohamed Abdelaziz, entre otras entidades y personalidades que apoyan la causa, es que se realice un referendum popular para determinar si es posible recuperar los territorios ocupados por Marruecos.
Comité de Amistad
En Argentina se formó un Comité de Amistad con el pueblo saharaui que cuenta con apoyo en el Parlamento. “En Mauritania viven bien en comparación con la vida en los campamentos de refugiados. Tienen una situación más confortable pero no resignan volver a su patria. Es más: en la zona de Mauritania yo encontré que los jóvenes estaban más radicalizados que en los campamentos de refugiados. Vos te encontrabas con algunos pequeños comerciantes saharauis en Mauritania, que tienen negocios viables. Pero ellos tienen una postura de recuperación de su tierra y plantean una salida militar. Esto es que la situación económica no les cambió la mentalidad a los saharauis. Vivan donde vivan, ya sea en Canarias, en los campamentos o en otros lugares de la diáspora tienen la misma concepción de recuperar su patria. Hoy plantean la salida militar”, confirmó el rosarino.
“En este viaje encontré que hay una posición radicalizada del pueblo saharaui en Mauritania. Que está mucho más radicalizado que en otros lugares. Esto marca la necesidad de que este tema sea abordado por países que son poderosos y que pueden darle una solución a este conflicto”, describió Suleiman.
En tanto, Suleiman recordó que acechan cuestiones importantes, peligros trascendentes en la región que complican la situación, más allá de un legítimo reclamo de soberanía popular. “A esta preocupación la expreso porque existe un peligro latente en la región que es el fundamentalismo. En la región de Mali están los grupos de Al Qaeda del Magreb y los grupos insurgentes Amazint, que son los que conocemos como los bereberes. Estos grupos iniciaron una verdadera tarea de desestabilización en Mali y pueden llegar a lograr nutrir sus organizaciones a partir de gente que hoy está excluida, que no tiene otra alternativa más que tomar las armas porque la situación está bastante comprometida para ellos”. Para el rosarino, que recorrió varias veces la región, la situación, “el florecimiento de estos grupos”, se da por las malas condiciones económicas en las que viven.
“Ellos comienzan a participar en actividades que son condenables. Esta gente que vive en la exclusión es caldo de cultivo para estas organizaciones. Al Qaeda puede llegar a encuadrar a muchos jóvenes que se oponen a Marruecos”, opinó Suleiman.
La paciencia del pueblo
Para Suleiman, el destierro afecta la calidad de vida de los saharauis, pero en muchas regiones de África se vive mal debido a las políticas económicas. Parte de eso se notó con las denominadas “Primaveras árabes”, que no llegaron a nada.
“El problema tiene que ver con toda una tradición de políticas neoliberales, con dirigencias que están en gobiernos que practican despotismos absolutos. El caso más típico y emblemático es el de la monarquía marroquí. La familia real de Marruecos maneja el 80 por ciento de los sectores más estratégicos de la nación. Entonces, cuando hablamos del poder concentrado en una o dos familias y la poca distribución de la riqueza, allí reside el problema de la economía. El marco de exclusión que se ve es importante”, expuso Suleiman como ejemplo. Preguntado sobre la reacción de los africanos ante este panorama, el referente árabe rosarino expresó: “Creo que la gente percibe eso y tiene conciencia pero en algunos escenarios creo que prima la resignación.
Hay que agregarle a esto las hábiles políticas de los dirigentes. Por ejemplo la monarquía marroquí es un gobierno que se vale de muy buenos cuadros en el ámbito político y el económico, en el espacio internacional, que presionan para desarrollar políticas colonizadoras. La dominación del Sahara Occidental es una muestra de ello.
¿Cuáles son las posibilidades económicas que tiene la familia real en Sahara occidental?
En primer lugar el usufructo de los recursos económicos. La cuenca pesquera dicen que es una de las más importantes del mundo. Hay negocios que hace esa familia real con empresas japonesas, españolas, expoliando las riquezas que le pertenecen al pueblo saharaui”, comentó Suleiman.
Referendum o armas
La principal bandera de lucha en este momento de los saharauis, quienes se sienten soberanos de la región que va entre Marruecos y Mauritania, en particular de la costa que les podría otorgar una vida sustentable, es la concreción de un referendum. Para ello deben contar con el apoyo de organismos internacionales como la ONU. Sin embargo, la búsqueda de esa acción política que defina el futuro de miles de personas desperdigadas entre campos de refugiados y el exilio para muchos es lenta.
“Se considera que el presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Mohamed Abdelaziz, es bastante tolerante porque entre el tiempo y la sangre eligió el tiempo. Sin embargo, como decía un estadista, cuando los pueblos agotan su paciencia hacen tronar el escarmiento. En ese sentido, el escarmiento no irá contra la dirigencia saharaui sino contra la monarquía marroquí que está empecinada en negar el referendum, porque sabe que va a perder. Que la población está censada y que el padrón electoral surgido fue acordado entre el Frente Polisario y Marruecos. Saben que van a votar por la independencia”, sentenció Suleiman.
Por este motivo es que al rosarino que recorrió Mauritania, en particular la región fronteriza Dajlet Nuadibú y su capital homónima, le llamó la atención el grado de radicalidad entre los jóvenes saharauis en el exilio.
Pedido en Diputados
El Comité de Amistad con el Pueblo Saharaui, con la adhesión de los diputados Juan Marcópulos y Araceli Ferreyra, convoca para hoy, a las 9.30, a una reunión a realizarse en el Anexo de la Cámara de Diputados de la Nación para idear un espacio de trabajo común donde profundizar sobre la situación de los derechos humanos en el Sahara Occidental y plantear una agenda de trabajo común. Sustentados en el compromiso de parlamentarios a través de la presentación de los proyectos de declaración y resolución para que la Misión de las Naciones Unidas para el Referendum del Sahara Occidental (Minurso) pueda velar por los derechos humanos en la región. Los legisladores están preocupados por las condiciones de vida de los saharauis, las persecuciones del gobierno de Marruecos, y los peligros que representa el creciente fundamentalismo en la región.