Roby Gattiker, el mejor jugador argentino de padel de todos los tiempos y figura representativa de Royal Padel en el mundo, estuvo de visita el pasado miércoles en Rosario para participar de exhibiciones en distintos complejos y promover los productos de la marca que el sanlorencino Ramiro Nanni lanzó al mercado local e internacional.
“Vine a hacer unas promociones a Rosario. Por eso agradezco que Ramiro siga creyendo en mi imagen a través de Royal Padel. Es un amigo que se esfuerza mucho para que nos mantengamos juntos por el camino de este deporte y para que pueda seguir jugando”, expresó Gattiker, once veces campeón mundial y uno de los pioneros del lanzamiento del padel en Argentina y España desde aquel furor de los 90.
“Y después seguiré de gira por el país. Lo próximo que tengo son presentaciones en Jujuy y Bolívar. Y de ahí vuelvo a irme hacia España por poco tiempo, para luego regresar al país”, añadió Roby sobre los compromisos inmediatos de su agenda profesional.
—Semanas atrás anduviste de gira por Tucumán.
—Sí, me fue muy bien. Y en lo personal quedé sorprendido por la respuesta de la gente. Los recuerdos que tenían de la única vez que había ido a jugar allá. Aparte me encantó el crecimiento del padel en esa región. Muchos jugadores han vuelto a la actividad y el público llenó el estadio. Eso me puso más feliz todavía.
—¿Qué objetivos tienen las giras por el país y el mundo?
—Dos objetivos: difundir la marca Royal Padel y llevar al deporte a todos lados. Y en parte devolverle todo lo que el padel me ha dado a lo largo de mi carrera. De alguna manera, ayudo a la gente incentivándolos a jugar, haciendo exhibiciones y apoyando el deporte.
Meses atrás, Gattiker anduvo de gira por España e Italia. “Jugué un par de torneos que no eran del World Padel Tour. A uno de ellos lo ganamos en pareja con Totó Calnegia. También me fue bien en algunas qualys, invitado por chicos que no tenían compañero de equipo. Hice muchas clínicas. En lo personal competí más de lo que imaginaba y me fue bárbaro”, destacó Roby.
—¿Qué diferencias aparecen entre el padel de España y Argentina?
—La primera diferencia que aparece es estructural. El nivel de clubes y de medios en España es impresionante. En la época dorada del padel, hicieron todo con mucho profesionalismo. Ahí nos marcan mucho la diferencia. Y el 90 por ciento de los mejores jugadores argentinos, están allá. Acá venimos creciendo muchísimo. Y se viene respondiendo mejor que en años anteriores. Igual tenemos mucho por mejorar a nivel de infraestructura.
—¿Hace falta mayor difusión a través de los medios?
—Sí, totalmente. Pero también faltan mejores lugares y mayor organización de parte de las asociaciones. Son varias cosas. Pero lo importante es que el padel continúa latente. La gente volvió a jugarlo y se encuentra nuevamente en crecimiento. De a poco pueden hacerse cosas muy buenas.
—¿Qué papel jugaría una televisación del padel al menos en canales de cable?
—Es lo que más difunde y muestra lo que representa la espectacularidad de cada deporte. En el caso del padel, participa mucho la gente al querer ver a los grandes jugadores. En España lo juegan más de 4 millones de personas. Y eso de rebote hace que haya un gran número de espectadores.
Gattiker desafía las leyes de la biológica. Y se mantiene vigente mientras cursa la tercera década como figura emblemática del padel mundial. Prácticamente, una leyenda viviente. “Yo simplemente trato de dar la mejor impresión y aportar enseñanzas técnicas del deporte a los más jóvenes. La forma de competir, la conducta dentro de la cancha, la caballerosidad en el deporte, el hecho de saber ganar y saber perder. Valores que faltan bastante en muchos ámbitos del juego. Y que son tan importantes transmitir. Porque lo que se da en la vida, también se da en la cancha”, concluyó.