Que Argentina haya ganado ayer sus dos partidos ante Chile por la segunda fecha de la Liga Sudamericana de fútbol playa, que se está disputando en el Caribe Canalla, tiene a Lucas Ponzetti como máximo responsable. Es que el joven rosarino de 18 años metió cuatro goles en el triunfo de la Sub 20 por 11-2 y también marcó un doblete en la victoria de la selección mayor por un ajustado 5-4.
Ponzetti se siente como en su segunda casa en la arena desparramada en la playa de Central. Ahí se forjó todos los veranos jugando entre amigos primero y luego representando al Canalla en torneos internacionales, siempre con la compañía de su hermano Maximiliano, integrante de la mayor. Ahora juega en Argentino, pero desde hace rato es convocado a la Albiceleste.
El menor de los Ponzetti hace todo fácil en un terreno difícil como la arena. Su capacidad acrobática le permite sacar chilenas (un clásico en la disciplina) repentinamente. Su velocidad a veces es impropia en la arena y ahí le saca enormes ventajas a los rivales.
Ayer fue su gran tarde ante Chile. Primero comandó a los pibes de la Sub 20 contribuyendo con cuatro goles en el abultado triunfo por 11-2. Los otros rosarinos en el plantel también se anotaron en el marcador: Nahuel Gigena, Nahuel Cipolletta, Nicanor Maciel y Alejo González. La goleada la completaron Matías Bravo, Agustín Blumberg y Manuel Pomar.
En este plantel Lucas, además de ser el capitán, es el máximo referente. No solamente por sus virtudes como jugador de fútbol playa, sino también por su calidad de líder.
Tras su gran actuación en la selección juvenil saltó a la arena con la mayor, tal como ocurrió el miércoles frente a Bolivia.
Y esta vez su aporte fue clave para la ajustada victoria 5-4 ante los chilenos marcando dos tantos. Los restantes fueron de Lucas Medero, Emiliano Holmedilla y Manuel Bordón.