El Senado discutirá este jueves en una sesión especial el proyecto de reforma de las jubilaciones especiales de jueces, fiscales y diplomáticos, que el oficialismo espera sancionar, mientras la oposición aún no definió si acompañará o rechazará.
Convocada para las 12, la sesión tiene como único proyecto del temario la modificación del régimen de las llamadas «jubilaciones de privilegio» que impulsó el Gobierno y que ya fue aprobado por la Cámara de Diputados, en medio de una tumultuosa sesión de la que la oposición se retiró.
El Frente de Todos tiene mayoría suficiente en el Senado para sancionar la ley y, para evitar que la iniciativa vuelva a la Cámara Baja, donde el oficialismo está más ajustado con los votos, no aceptaría modificaciones como reclama Juntos por el Cambio.
La bancada opositora llevará un dictamen propio al recinto elaborado por el porteño Martín Lousteau, que establece, entre otras cosas, la creación de una comisión que revise todos los regímenes especiales de jubilaciones dado que, según explicó, los de jueces y diplomáticos tienen menor impacto en las cuentas del sistema que la del sindicato de Luz y Fuerza.
Además, propone que quienes hayan hecho la mayor parte de sus aportes con el sistema actual puedan jubilarse bajo bajo ese régimen especial y no se vean alcanzados por la misma norma, pero hasta el momento, no hay consenso sobre esa iniciativa.
En Juntos por el Cambio hay varios senadores que no quieren votar en contra de la iniciativa del oficialismo para no quedar en la vereda de quienes «defienden los privilegios», pero al mismo tiempo reciben algunos reproches de sus colegas diputados, que se negaron a votar.
Una de las fuentes consultadas adelantó a esta agencia que si en la sesión el oficialismo decide que el proyecto se vote en general y en particular al mismo tiempo, la mayoría de Juntos por el Cambio votará en contra.
En cambio, si se abre la discusión en particular, optarían por votar a favor en general y proponer luego las modificaciones, aún sabiendo que el Frente de Todos las rechazará.
Entre otros puntos, el proyecto que se someterá a votación eleva del 11 al 18% los aportes adicionales al régimen general y mantiene, para los funcionarios judiciales, el 82% móvil pero sobre un promedio de las últimas 120 remuneraciones actualizadas en el cálculo del haber inicial y no sobre el último sueldo.
Para los funcionarios diplomáticos, la tasa de sustitución se reduce del 85 al 82%, y también se calcula sobre la base del promedio de las últimas 120 remuneraciones actualizadas.
Además, se eleva la edad jubilatoria para los hombres y pasa de 60 a 65 años pero con una escala gradual que se completará en 2025, de modo tal que la edad será 60 años en 2020; 61 años en 2021; 62 años en 2022; 63 años en 2023; 64 años en 2024; y 65 años en 2025.