El bonaerense Federico Gil se convirtió a fines de marzo, en Nueva Delhi, India, en el 146° atleta argentino en clasificarse para los Juegos Olímpicos de Tokio, en la modalidad Skeet de tiro.
«La plaza me llegó un año después de lo esperado. Pasaron muchas cosas en este último año pero estoy feliz de haber logrado la clasificación», contó Gil en diálogo con Télam.
Federico sumó su plaza a las que ya habían conseguido para la Argentina su hermana Melisa, también en Skeet; Fernanda Russo en 10m Rifle de Aire y Alexis Eberhardt en 50m Rifle 3 Posiciones, todos en los Juegos Panamericanos de Lima 2019.
«En el momento en que se suspendió la Copa del Mundo en Nueva Delhi en marzo del 2020, yo estaba ahí nomás de la clasificación. Venía de ser subcampeón en Chipre y estaba segundo en el ranking. Me frustré, me daba bronca porque al posponerse todo un año no iba a llegar en las mismas condiciones, pero ahora a pesar de la pandemia y los cambios de reglas ya estoy clasificado, por suerte», relató el tirador de 32 años.
Gil, que participará de su segunda cita olímpica (en Río 2016 finalizó en el 26° puesto), admitió que su actuación en Nueva Delhi, un décimo puesto, no «estuvo ni cerca de mi mejor rendimiento pero logré mantenerme en el ranking. Durante la pandemia pude entrenar pero no competir».
«Dos semanas antes de la Copa en India estuve en El Cairo. Viajar con la pandemia ya es distinto. Seguís los protocolos, tomás todos los cuidados, te testean al llegar, el día anterior a competir, estás rezando para que no te dé positivo y todo lo que estuviste entrenando no sirva de nada… Y el competir también cambió: estás más aislado del resto», explicó Gil.
Federico Gil, al igual que su hermana Melisa, es entrenado por su papá Horacio. La familia de tiradores, que también tiene un estudio jurídico, pudo practicar durante el 2020 pandémico en una cancha montada especialmente en su campo familiar en Arrecifes.
La cancha construida en la ciudad del norte de la Provincia de Buenos Aires simula a la que habrá en los Juegos de Tokio, con la misma maquinaria, la misma electrónica y las mismas computadoras.
Además, los Gil se armaron un gimnasio para hacer ejercicios específicos de su deporte y Federico abrió una empresa importadora de armas, municiones y elementos de náutica y pesca con varias marcas que son sus sponsors en el deporte.
«Con mi hermana entrenamos juntos pero a veces tenemos cronogramas de competencia distintos. Ahora se canceló una copa en Tokio por el coronavirus. En mayo estamos inscriptos en un torneo en Italia, la idea es viajar y quedarnos en Europa para ganar rodaje antes de los Juegos. Siempre estás con la incertidumbre de que todo se haga porque ya estamos cerca de Tokio 2020», admitió Federico.
Con respecto a las vacunas, el último argentino clasificado a los Juegos tiene sus dudas. «Me gustaría estar vacunado un mes antes de competir porque te puede dar fiebre. Me genera incertidumbre cómo va a ser el tema de la vacunación para Tokio. Mi papá (y entrenador) ya está vacunado por ser de riesgo».
