Franz Beckenbauer, leyenda del fútbol alemán fallecido el pasado domingo a los 78 años, fue inhumado hoy en un cementerio del sur de Múnich, en una ceremonia privada de la que participaron sus familiares y amigos más cercanos.
Según indicó la prensa alemana, los restos del campeón mundial como jugador y como entrenador con el seleccionado de su país, fueron inhumados en el cementerio de Perlacher Forst, ubicado a sólo dos kilómetros de la casa en donde el ‘Kaiser’ pasó su infancia y donde comenzó su conexión con la pelota.
Beckenbauer fue enterrado en la cripta familiar, junto a la tumba de su hijo Stephan, quien falleció en el 2015 de un tumor cerebral, cuando tenía 46 años. De la ceremonia participaron un grupo reducido de familiares y amigos.
El histórico futbolista y DT atravesaba un deterioro de salud ‘significativo’, según reflejaron los medios periodísticos alemanes, y pasó sus últimos años en su casa de Salzburgo, ciudad austríaca vecina de su Baviera natal.
Este viernes 19 de enero se realizó un homenaje en su memoria en el Allianz Arena, estadio en el que juega de local el Bayern Múnich, club en el que Beckenbauer disputó gran parte de su carrera y en el que ganó cuatro títulos de la Bundesliga, cuatro Copas DFB, tres Copas de Europa de la UEFA, una Recopa de la UEFA y una Copa Intercontinental.
Los jugadores salieron a realizar los movimientos precompetitivos con una camiseta especial para la ocasición, número 5 y antes de empezar el encuentro frente al Hoffenheim, que los de Múnich ganaron por tres a cero, por la 16a fecha de la Bundesliga.
La ceremonia fue transmitida en directo por la Primera Cadena de la Televisión Alemana (ARD) y el canciller alemán, Olaf Scholz, estuvo presente.