La previa del último primer día, una tradición que llevan adelante alumnos que comienzan su último año de secundaria terminó con 9 adultos demorados y 68 adolescentes que fueron retirados por sus padres.
Fue a partir de un operativo de la Secretaría de Control y Convivencia de la Municipalidad, que fue alertada sobre la modalidad de los adolescentes que suelen juntarse el día previo a empezar las clases. En general alquilan un lugar, beben alcohol y luego van todos juntos a la escuela.
“Sabíamos que en determinados colegios se iban a juntar jóvenes que habían contratado colectivos; seguimos al rodado para ver cual era el domicilio; y una vez arribado al lugar, cuando descendieron todos los chicos, se secuestró el colectivo y se lo llevó al corralón”, dijo en diálogo con la prensa la secretaria de control, Carolina Labayru.
“Al lugar empezaron a llegar jóvenes de 3 colegios distintos, entonces se le pidió intervención al fiscal, que ordenó que los 7 adultos sean derivados a la comisaria segunda para la búsqueda de antecedentes; mas los dos responsables de la vivienda, que la habían alquilado; y a los 68 menores, se dio intervención a la subsecretaria de la niñez, adolescencia y familia; quien ordeno que cada padre de los chicos vaya al domicilio a retirar a su hijo”, explicó la funcionaria municipal. El último de los chicos fue retirado por sus padres a las 5 de la mañana.
Labayrú adelantó que realizarán “una la denuncia penal contra la persona responsable de la vivienda; quien dio en alquiler la casa”.