El financista Federico Elaskar efectuó ayer en la Justicia una declaración con la que pretendió demostrar que hubo “una operación” del periodista “Jorge Lanata para voltear el gobierno” y dijo que no conoce al empresario Lázaro Báez ni a su familia. Así lo informó el abogado de Elaskar, José Manuel Ubeira, tras la declaración de su cliente ante el juez Sebastián Casanello y el fiscal Guillermo Marijuán en la causa por presunto lavado de dinero donde está imputado junto con Báez y otro grupo de personas.
Elaskar desmintió el contenido del programa “Periodismo Para Todos” de Lanata, donde se lo ve hablando de presuntas maniobras ilegales, y dijo que hizo eso para “recuperar lo que le debían de la venta de la financiera SGI y porque a Lanata le servía para su programa y para pegarle al gobierno”, añadió.
En tanto, el otro implicado en este caso y que, como Elaskar, hizo revelaciones por TV, el contador Leonardo Fariña, declaraba anoche ante el juez y el fiscal. En tanto, los dichos de Elaskar ante la Justicia, dijo Ubeira, tuvieron como fin demostrar que “fue una operación de Lanata para voltear al gobierno”.
Y ante los periodistas, Elaskar aseguró: “No conozco a Lázaro Báez, ni a su hijo Martín, ni a su familia, y con (el contador Leonardo) Fariña (otro de los que reveló esas supuestas maniobras) no hice ninguna operación, solamente me acercó a los compradores de SGI”.
Además precisó que con Fariña tuvo una relación de tres meses. La financiera SGI –situada en Puerto Madero y conocida como “La Rosadita”– fue comprada por “Helvetic Group”, que se sospecha que es de Báez, pero Elaskar dijo que trató con Daniel Pérez Gadín (ex contador del empresario) y que tenía entendido que la compañía era de una persona llamada Marcelo Ramos.
Elaskar denunció en el programa de Lanata que Pérez Gadín lo amenazó si no le vendía la empresa: “Vas a aparecer como Forza”, dijo que le advirtió, por Sebastián Forza, una de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez relacionado con la “mafia” de los medicamentos, que apareció asesinado a la vera de una ruta de esa localidad bonaerense. “Me rectifiqué. No existieron amenazas”, dijo Elaskar.
Y sostuvo también que no conocía a “Teegan Inc”, empresa off shore que –según reveló en televisión– se creó a nombre de Martín Báez en Panamá y con un capital inicial de 1.500.000 de dólares que se depositó en un banco de Suiza. “Lanata vino con el copyright de todo lo que tenía que decir”, sostuvo Ubeira, y calificó a Fariña como un “megalómano y un mitómano”.
Ubeira también sostuvo que Elaskar justificó uno de los reportes de operaciones sospechosas (ROS) que se le imputan por movimientos de dinero que no podría explicar, según informes de la Unidad de Información Financiera (UIF).
Vestido con traje gris, camisa celeste, corbata a cuadritos y zapatos negros, Elaskar presentó un escrito ante el juez y luego declaró unas cinco horas y lo seguirá haciendo en una fecha a fijarse para contestar las preguntas del fiscal Guillermo Marijuán.
Más informal, Fariña, con campera de cuero verde, jean, zapatillas blancas y su clásico rodete, seguía declarando al cierre de esta edición ante el juez Casanello y el fiscal. Fariña y Elaskar no se saludaron al llegar pero se cruzaron en los pasillos de Comodoro Py 2002, cuando salían a fumar o iban al baño. “No tengo nada que hablar con él”, se justificó Elaskar.
