El Gobierno convocó hoy al funcionario a cargo de la Embajada de Reino Unido y le hizo entrega de una nota de protesta por los nuevos ejercicios militares en las Islas Malvinas, los que calificó como «una nueva provocación» mediante «una pretendida demostración del poder de fuego del buque británico».
«La República Argentina rechaza en los términos más contundentes la realización de estas maniobras navales y militares en territorio argentino ilegítimamente ocupado por el Reino Unido, que constituyen una injustificada demostración de fuerza y un deliberado apartamiento de los llamamientos de las numerosas resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales, que instan tanto a la Argentina como al Reino Unido a reanudar las negociaciones», indicó la Cancillería.
En un comunicado oficial, la cartera que conduce Héctor Timerman recordó que en la Sesión especial sobre la Cuestión de las Islas Malvinas celebrada el 10 de noviembre pasado, el Parlamento del Mercosur «rechazó una vez mas la presencia militar británica en el Atlántico Sur, ya que consideró que ésta resultaba contraria a la política de la región de apego a la búsqueda de una solución pacífica de la disputa de soberanía».