Un diluvio anegó ayer Comodoro Rivadavia –donde escasas veces llueve–, el tórrido viento zonda obligó a suspender clases en Mendoza y alertan sobre fuertes nevadas en Bariloche y la zona andina patagónica en una jornada más que demostrativa de que todas las contingencias meteorológicas se pueden dar en el país, y en un mismo día.
En Comodoro Rivadavia, una lluvia de 60 milímetros que cayó en pocas horas provocó estragos en la ciudad, la más poblada del Chubut, donde los bomberos debieron socorrer a los pobladores de los barrios alejados del centro en una tarea que se les hizo complicada por el estado de las calles “que se transformaron en verdaderos ríos”, según explicó uno de ellos.
La ciudad quedó prácticamente paralizada, cerraron la mayoría de los comercios, se saturaron los teléfonos de Defensa Civil y hasta rebalsaron las cloacas.
El Ministerio de Educación del Chubut debió suspender las clases en todas las escuelas y también debió interrumpirse totalmente el transporte urbano de pasajeros ante la imposibilidad de transitar por las calles.
En Bariloche, mientras tanto, la primera nevada del año cubrió ayer los barrios más altos de la ciudad y el Servicio Meteorológico Nacional emitió un alerta anticipando fuertes vientos y más nevadas hasta el fin de semana.
La fuerte lluvia que venía cayendo desde el mediodía del martes y se mantuvo durante casi toda la noche se transformó en nevada a las 7 de la mañana, lo que generó una acumulación de pocos centímetros en el oeste y los barrios del sur de la ciudad.
En Mendoza, finalmente, las clases debieron ser suspendidas ayer en el centro y norte de la provincia debido a un temporal de viento zonda, con ráfagas en algunas zonas superaron los 70 kilómetros y temperaturas en fuerte ascenso.
El fenómeno no afectó los departamentos del sur como San Rafael, General Alvear y Malargüe, donde por el contrario llovió y bajó la temperatura.
Los mayores inconvenientes, aparte del agobio que provoca este viento cálido que afecta a las provincias de San Juan y Mendoza, se registraron en zonas de mayor arbolado, con caída de ramas y ejemplares enteros, ocasionando cortes de cables de energía eléctrica.