Pese a que la Unión Tranviara Automotor (UTA) decidió no plegarse al paro de este martes, la medida de fuerza se hace sentir en la ciudad con la presencia en las calles de varios sindicatos. La Asociación Empleados de Comercio (AEC) recorrió la zona céntrica por la mañana para garantizar el cumplimiento de la medida de fuerza en algunas grandes firmas. Delegados y representantes del gremio se apostaron en la puerta de Falabella, la tradicional tienda ubicada en Córdoba y Sarmiento que había abierto sus puertas y tuvo que cerrarlas por la presión sindical.
Banderas del gremio y alguna que otra bomba de estruendo visibilizaban el malestar ante la patronal que, según indicó una de las delegadas, “amenazan a los empleados” para que no acaten las medidas de fuerza.
“Si bien no son amenazas directas, dicen por ejemplo «si no venís a trabajar no te doy los horarios que pediste, o los días». Por eso estamos acá y estaremos todo el tiempo que sea necesario para garantizarles los derechos a los compañeros con la presencia de todo el gremio”, explicó la delegada de AEC.
Otra de las grandes tiendas que suele abrir los días de paro general es la que está ubicada en la esquina de San Luis y Corrientes –El Palacio de la Oportunidad–, aunque este martes por la mañana no lo hizo.
Algunos supermercados abrieron
Durante su recorrida, El Ciudadano constató que las sucursales de algunas cadenas de supermercados abrieron. Por ejemplo, la francesa Carrefour. La prosecretaria de AEC, Silvana Crocci, minimizó el impacto: “Los supermercados, en relación a la gran cantidad de comercios que hay en la ciudad, es un porcentaje ínfimo. Los trabajadores realizaron asambleas junto al gremio y decidieron no concurrir a los lugares de trabajo defendiendo sus derechos. Si hay personas en los puestos de trabajo, son personal jerárquico”, estimó la dirigente.
