“No sé qué va a decidir el técnico, si fuera por mí, me quedo en mi casa”. Con cierto tono de broma y con mucho de realidad, Pablo Pérez dejó en claro su pensamiento sobre estar o no el sábado ante Sarmiento a partir de haber recibido la cuarta amarilla.
Pérez es un jugador muy importante para Newell’s. El buen funcionamiento con Talleres y Atlético Tucumán, tuvo mucho de su participación, incluso con la sociedad que por momentos armó junto a Nicolás Castro. Y no tenerlo en el Clásico sería un golpe duro para el equipo, y Sanguinetti lo sabe.
“¿Cómo hago para que no me saquen una tarjeta? ¿Vos me pondrías?”, retrucó con humor ante una pregunta periodística. Y al recibir el “no” del cronista, Pérez fue terminante: “Yo tampoco”.
Está clara la postura de Pérez. Quiere jugar el Clásico. Y sabe que jugar con Sarmiento es un riesgo grande, ya que la posibilidad de amarilla es grande. En cinco fechas el volante fue amonestado en cuatro. Sólo zafó en la derrota 3-0 ante Argentinos, donde fue reemplazado a los 20 minutos del complemento.
“Seguramente vamos a charlar con el técnico y decidiremos lo mejor”, sostuvo el mediocampista leproso, que hoy al retornar a los trabajos en el Centro Deportivo Griffa posiblemente converse sobre el tema con Sanguinetti.
¿Qué decidirá Archu? Es probable que el DT rojinegro respalde la decisión de Pérez de no jugar. Sanguinetti no puede correr el riesgo de perderlo en el Clásico, y además ya sabe que el jugador no quiere arriesgar, y si juega no estará con la cabeza en el partido como siempre sucede.
Frente a esta situación, el entrenador deberá analizar las alter-nativas que tiene para sustituir a Pérez, que en los papeles son dos: Juan Sforza o Marcos Portillo.
Para el esquema 4-4-1-1 con doble cinco que está usando Newell’s, Sforza podría adaptarse perfectamente, aunque perdería algo de juego. En cambio, el juvenil Portillo podría darle más profundidad con la pelota (generalmente juega de volante por derecha), aunque en su contra aparece la poca experiencia y jugar en una posición donde no acostumbra a despeñarse.
Sanguinetti no reniega de utilizar juveniles, justamente esa era una de las fortalezas que la dirigencia vio de su paso por Banfield. Reemplazó a Vangioni con Martín Luciano, mandó a la cancha a Jacob por el lesionado Méndez, optó por Ramiro Sordo cuando García no estaba en plenitud, y también utilizó a Diego Calcaterra, Guillermo Balzi y Nazareno Funez. Si debe incluir a Portillo, no dudará a pesar de su juventud o falta de experiencia.
Por otra parte, Armando Méndez se retiró con una molestia en el isquiotibial derecho, y este martes será sometido a un estudio de imágenes para determinar si hay lesión o no. El lateral uruguayo podría ser preservado ante Sarmiento, lo que le daría lugar al juvenil Tomás Jacob, quien ingresó muy bien ante Atlético Tucumán.
En cuanto a Leonel Vangioni, si bien se recupera muy bien de la distensión en el isquiotibial derecho, es probable que el cuerpo técnico no quiera forzar su regreso, en especial por el buen rendimiento de Martín Luciano. El Flecha seguiría como titular un partido más, y el Piri podría ir al banco o apuntar directamente al Clásico del domingo 20.