Las autoridades chilenas buscan a dos chamanes -uno local y otro brasileño- quienes realizaron un ritual utilizando el veneno extraído de una rana amazónica, que habría causado la muerte de uno de sus pacientes que acudió a verlos por una dolencia.
Los curanderos Carlos Molina, chileno, y Edson do Santos Katukina, brasileño, realizaron el último viernes un ritual de sanación masivo en el que participó Daniel Lara, quien falleció poco después de que le inocularan una sustancia conocida como Kambo, veneno que secreta una pequeña rana amazónica.
Según informó la prensa local, la sustancia -que se usa en rituales de sanación de la tribu Katukina de donde proviene Edson- fue aplicada a Lara para tratarle una dolencia en los discos de la columna. Minutos después, el paciente falleció.
El hecho se produjo en la localidad de Pichidegua (150 km al sur de Santiago), en la región Libertador Bernardo OHiggins.
«El examen reveló que el fallecido presentaba una severa dilatación del corazón, edema pulmonar y disfunción hepática, pero habrá que esperar el examen toxicológico para determinar si el veneno aplicado aceleró estas patologías de base», dijo a la prensa el fiscal Aquiles Cubillos.
La Policía de Investigaciones emitió una alerta fronteriza para evitar que los chamanes implicados salgan del país.
El chamán es un personaje que tiene su origen en las comunidades nativas de África, América, Asia y Oceanía, a quien se le atribuye sabiduría, capacidad de sanar mediante rituales y de comunicarse con los espíritus.