Chile vivió este jueves su segundo día de huelga general en medio de una crisis social que no cede desde hace casi una semana. Si bien no se reportaron hechos de violencia en la madrugada santiaguina, durante la vigencia del toque de queda, que fue extendido por un día más en Santiago, Concepción, Valparaíso y otras regiones.
En tanto, la Cámara de Diputados de Chile aprobó este jueves en general un proyecto de ley que reduce de 45 a 40 horas semanales la jornada laboral, una medida propuesta por el Partido Comunista (PC) y debatida en medio del mayor estallido social desde el regreso de la democracia al país.
Para descomprimir más la crisis, el presidente Sebastián Piñera firmó este jueves y envió al Congreso el proyecto de ley de estabilización de tarifas eléctricas que permitirá anular las recientes alzas (9%) de la electricidad, en el marco del paquete de medidas con el que procura aplacar los reclamos ciudadanos que estallaron por un aumento en el boleto de subte.
Derechos humanos
En tanto, se conoció este jueves que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) enviará a Chile una misión de verificación para investigar posibles violaciones a los derechos humanos durante la represión que siguió al estallido social en ese país, informó la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, la ex presidenta chilena Michelle Bachelet en su cuenta de Twitter.
El último reporte del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) mantiene en 18 la cantidad de muertes a causa del estallido social –cinco por disparos de bala de las fuerzas de seguridad–, 535 personas heridas –239 de ellas por armas de fuego– y 2.410 detenidos.