Amor a la camiseta, un técnico serio como Gerardo Martino que actúa como llamador, cuestiones afectivas que juegan fuerte, la búsqueda de sueños incumplidos con los colores rojinegro, sobran los motivos para explicar lo “inexplicable”. A veces parece imposible entender desde la razón algunos actos y el regreso de Maximiliano Rodríguez, Gabriel Heinze y Nacho Scocco al Parque forman parte de algo que muchos no pueden entender: el sentido de pertenencia.
En ese aspecto, este 2012 formará parte de un año que los hinchas leprosos siempre recordarán como el año de los regresos, el año donde muchos entendieron que aquel paso de Lucas Bernardi en 2008 tenía que tener continuidad. Y con Tata Martino en el banco como primera figura, lo imposible fue posible y los hinchas leprosos tuvieron la chance de romperse las manos para aplaudir los regresos de Maximiliano Rodríguez, Gabriel Heinze e Ignacio Scocco. Tres hijos pródigos que dejaron suculentos contratos europeos para volver al club de sus amores, sin importar nada más que el pedido de su corazón. Liverpool, Roma y los petrodólares de Arabia no fueron obstáculo para que los tres ídolos leprosos pegaran la vuelta.
“Es el día más feliz de mi vida”, expresó la Fiera el día que diez mil leprosos se juntaron en el Coloso al mediodía para verlo de nuevo con la casaca leprosa. “Varias veces dije que no pensaba ni estaba obligado a volver, pero sentí que era el momento y cuando el corazón manda, no hay más que explicar”, dijo el Gringo Heinze, quien apenas pisó el Coloso se transformó en ídolo de los hinchas. Y que decir de Nacho Scocco, que entrenó un mes solo en Adiur esperando que los árabes entiendan que los afectos no tienen precio. Y su espera valió 13 goles. ¿Qué más decir?
Lorente continúa cuatro años más
El 2012 no fue un año más en lo institucional ya que en la agenda aparecía el mes de diciembre como clave a partir de las elecciones que determinarían quién iba a dirigir los destinos del club en los próximos cuatro años. Finalmente sólo el oficialismo a través de la Agrupación 1884 presentó los avales necesarios para participar de los comicios y Guillermo Lorente consiguió su continuidad.
El Nuevo Espacio Rojinegro fue el primero en aparecer como grupo opositor, aunque varios integrantes de esta agrupación se mantuvieron en el oficialismo como Jorge Ricobelli, Pablo Morosano o Roberto Benedetto. Si bien el NER amagó con ser el grupo opositor más fuerte, nunca pudo encontrar su ‘candidato’. Pablo Javkin apareció como el nombre a apuntalar, pero desistió de postularse y la agrupación se quedó sin elecciones.
El que sí se lanzó como candidato fue Jorge Griffa, pero siempre pareció que su postulación estaba más respaldada en un apellido ilustre y no tanto en un grupo homogéneo que apareciera con un proyecto opositor. En medio de desprolijidades y denuncias entre sus propios integrantes, Griffa desistió de su postulación y si bien el MUR intentó llegar a los 312 avales para participar con otro candidato, no lo logró.
Frente a esto el oficialismo, único frente que cumplió con los requisitos, aseguró su permanencia por cuatro años más con algunos cambios. Guillermo Lorente ahora estará secundado por Jorge Ricobelli y Vicente Tasca. Pablo Morosano seguirá como secretario y Roberto Benedetto se hizo cargo de la tesorería. Y en la comisión directiva aparece ‘sangre nueva’ con presencia de Autoconvocados, Militancia Leprosa y la Subcomisión del Hincha.