La seccional Rosario de la Unión Tranviarios Automotor confirmó esta noche que el gremio acata la conciliación obligatoria por cinco días que dictó el Ministerio de Trabajo de la Nación, lo que puso en suspenso el paro por 24 horas para el transporte público de pasajeros de todo el país para este viernes.
“Informamos que las empresas niegan la posibilidad de aumento salarial, tanto en el área metropolitana de Buenos Aires como en el interior del país”, marcó el gremio de colectiveros, que así anunció el inicio de un plan de lucha “en todo el territorio del país”.
“La medida de fuerza es empujada por quienes tienen la responsabilidad de solucionar la grave crisis en la que están poniendo al transporte, por todos los efectos «dañosos» que causa, afectando a los 10 millones de usuarios diarios del Amba y 9 millones del interior del país, poniendo seriamente en riesgo la seguridad pública”, sostuvo el secretariado nacional de la UTA.
El sindicato apuntó a la “exclusiva responsabilidad del sector empresario, de las máximas autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación, y de los responsables de Transporte en las provincias y el gobierno de la ciudad de Buenos Aires” por la falta de acuerdo salarial que motiva la medida de fuerza.
Por la noche llegó la decisión de Trabajo, que dispuso «dar por iniciado un período de conciliación obligatoria por el término de cinco (5) días hábiles (…) debiendo retrotraerse la situación a la existente con anterioridad al inicio del conflicto y por el plazo de duración del presente procedimiento conciliatorio». Y la confirmación de que UTA la acatará.
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