Un informe de la APSV indica que entre enero y abril de 2022 se llevaron a cabo 64.885 operativos de alcoholemia, lo cual supone un incremento sustancial con respecto al mismo trimestre de 2021, cuando se hicieron 19.021, y al de 2020, con 8.422.
Respecto a las alcoholemias positivas sancionables, es decir mayores a 0,50 gramos, en 2020 se habían registrado 373 (4,4%), en 2021 fueron 705 (3,7%) y en el primer trimestre de 2022 se tomaron 1.317 (2%), lo que revela una reducción de más de la mitad con respecto a 2020.
La provincia de Santa Fe cuenta con 22 puestos fijos de fiscalización, que se encuentran trabajando las 24 horas, y 80 puestos de control alternativos, que se traduce a un total de 100 operativos funcionales diarios y más de 45.000 vehículos fiscalizados por mes.
La utilización de los alómetros, dispositivos que detectan la presencia de alcohol por aire espirado, contribuyó a que se incrementara la cantidad de tests tomados.
La APSV señaló que el nuevo dispositivo tiene como objetivo optimizar recursos y además incrementar y agilizar los controles de alcoholemia en todo el territorio provincial.
Durante el primer trimestre de este año se realizaron 33.010 tests con alómetros, lo que representa un 71% del total.
La directora de la APSV, Antonela Cerutti, dijo que “ante una estadística que demuestra que más de 90% de los siniestros viales ocurre por el factor humano, el trabajo de la PSV toma relevancia en cada control de alcoholemia”.
“Cada caso positivo detectado implica la extracción de un conductor peligroso que no continuará circulando en la vía”, consideró al funcionaria.
Comentarios