La Cámara de Empresas Inmobiliarias de Rosario (Cadeiros) realizó un relevamiento sobre la ocupación de locales comerciales en la ciudad que arrojó que hay un 7 por ciento más de negocios cerrados si se compara el primer semestre de este año con el del año pasado. Igualmente, desde el sector destacaron que los mismos están en su mayoría fuera de los corredores tradicionales y se encuentran en su mayoría en algunos barrios y zonas periféricas. Las razones son económicas: la suba de los alquileres y la caída de ventas de los últimos meses tras la última devaluación y los retrasos en las negociaciones paritarias se convirtieron en un combo pernicioso para la economía local.
El presidente de Cadeiros, Carlos Rovitti, remarcó en declaraciones a este diario que “la fuerte devaluación de principio de año y la consecuente inflación realmente han planchado la economía”. “Frente a esto, los comercios empiezan a vender mucho menos y la ecuación económica empieza a no cerrarles. Es así como se produce, en muchas ocasiones, el cierre de los locales”, señaló.
“Lo que hicimos fue un relevamiento de los inmuebles que se alquilan a través de inmobiliarias y nos encontramos que en la actualidad hay un 7 por ciento más de locales cerrados comparando el primer semestre de este año con el mismo semestre del año pasado. Como dato importante a destacar hay que decir que estos locales están fuera de los circuitos tradicionales como lo son calle Córdoba o calle San Luis y están en los barrios, en la periferia o fuera de los corredores tradicionales. Se pueden ver algunos locales cerrados en calles céntricas como Rioja, San Lorenzo o Santa Fe, pero en menor medida”, siguió.
El empresario inmobiliario se trasladó siete años atrás –más específicamente a 2007– para recordar que, en metros cuadrados per cápita, Rosario fue la ciudad con mayor cantidad de construcción de toda Sudamérica y que, en general, en cada edificio que se construyó se hicieron locales en planta baja para ser destinados al comercio.
“En un primer momento éstos se comenzaron a ocupar porque la situación era buena, pero ahora se hace difícil mantenerlos abiertos, dependiendo de la zona. También están los casos de grandes locales emblemáticos, como el que ocupaba Interio, en Córdoba entre Paraguay y Corrientes, que pese a ser ocupados por grandes firmas éstas no pueden mantenerlos abiertos por los altos costos generales”, indicó.
Al ser consultado sobre cómo había sido el comportamiento del valor de los alquileres en el último tiempo, Rovitti respondió que “hace ya varios meses, en una conferencia de prensa, pedimos que a la hora de renovar alquileres los propietarios no pidieran más del 25 por ciento de aumento”.
“Algunos lo tomaron al consejo, porque el que fija el precio es el propietario, y otros no. Lo que nosotros dijimos en ese momento es que el bolsillo del asalariado se iba a encontrar deprimido porque la inflación iba a ser superior al aumento de salarios de las paritarias. Es más: la pérdida de poder adquisitivo se va a ver más reflejada a fin de año. Y sin falsa modestia, creo que nuestro consejo ayudó a que no haya más locales vacíos”, afirmó.
Sobre cómo estima que se comportará el mercado en el corto y mediano plazo, Rovitti destacó que es bastante difícil hacer una proyección ante un escenario tan dinámico y lleno de incertidumbre.
“La verdad es que no sabemos qué puede pasar a futuro a nivel económico. Vamos a ver qué pasa cuando sea la liquidación de la soja, ver si se produce ese famoso derrame que señalan muchos economistas y si se reactiva el mercado. Resta esperar”, concluyó.
Por último, cabe recordar que tal como publicó recientemente El Ciudadano, la baja en las ventas del sector comercial de la ciudad quedó reflejada por primera vez en la recaudación por tasas del municipio.
Según se desprendió de la recaudación del Derecho de Registro de Inspección (Drei), la facturación de los negocios creció en los primeros cinco meses de 2014 un 4 por ciento menos que el mismo lapso del año anterior.
Echesortu a contramano: hay lista de espera
Sobre la situación actual de los comercios en la ciudad y los cierres que se verifican, el presidente de la Federación Rosarina de Paseos Comerciales, Fabio Acosta, señaló que “día a día se registran más locales vacíos y además ahora hay una rotación muy baja”.
“Nosotros empezamos a notar esto a partir de la mitad del año pasado. Estamos ante un efecto goteo que ahora tiene características alarmantes. Acá se dan varios factores, como que los alquileres pegaron un envión hacia arriba, quedaron altos, y las ventas se desplomaron. Esa conjunción hizo que ahora nos encontremos en esta situación”, analizó.
Por su parte, el presidente de la Asociación Centro Comercial calle Ayacucho, Sergio Nazzi, coincidió y dijo que “se están notando muchos más locales cerrados”. “Esto es algo que viene siendo progresivo desde hace dos años y empeoró mucho, especialmente en el último tiempo. De dos años a tres meses para atrás un 50 por ciento se iba del local por razones económicas, es decir: no le cerraba la ecuación, y un 50 por ciento por inseguridad. De tres meses a esta parte, un 75 por ciento cierra por razones económicas y un 25 por ciento por inseguridad”, añadió.
Otra visión
Lejos del pesimismo de los dos primeros, el presidente del Centro Comercial Echesortu, Saúl Eluk, remarcó que en la zona están con ocupación plena de locales y que la situación mejoró en el último tiempo.
“A nosotros nos están beneficiando los problemas que están teniendo los comercios en el centro. La gente está volviendo a comprar en los barrios, hay un corrimiento, y en nuestro caso hay gente en lista de espera para alquilar”, explicó.
“Por lo que seguimos peleando, y en esto pedimos que el municipio escuche nuestros reclamos, es porque se establezca el estacionamiento medido para que haya rotación vehicular porque muchas veces a los clientes se les dificulta poder encontrar lugar para estacionar”, concluyó Eluk.