El dólar “blue” en Venezuela, que se conoce en el país caribeño como “lechuga verde”, llegó a intercambiarse en las últimas horas a 22 bolívares fuertes luego de que el viernes pasado se anunciara en ese país una devaluación que llevó el tipo de cambio oficial de 4,30 a 6,30 bolívares fuertes. Así, el valor del dólar ganó un 46,5 por ciento.
Ésta es la segunda devaluación en el país presidido por Hugo Chávez en tres años. A principios de 2010, esta economía latinoamericana llevó su dólar desde los 2,15 hasta 2,60 y 4,30 bolívares fuertes, según a qué sector importador correspondía. A diferencia de las anteriores, el nuevo tipo de cambio de 6,30 se aplica a todos los sectores sin tasas preferenciales para productos de necesidad básica. Existen solamente excepciones temporales para algunos sectores, como alimentos, comercio o salud, que ya habían solicitado divisas.
El dólar en el mercado en negro se intercambiaba hasta el viernes pasado en torno a 19,50 bolívares fuertes. Es decir que la devaluación en el mercado paralelo de cambios fue menor, hasta ahora al menos, de casi un 13 por ciento. El dato sobresaliente es la brecha que existe entre el dólar oficial y el “lechuga verde”: llega a casi 240 puntos porcentuales. En la Argentina, la diferencia entre el dólar oficial, de 5 pesos y el “blue”, de 7,67, es de 53,4 puntos porcentuales.
En noviembre de 2011, cuando comenzaban los controles cambiarios en la Argentina, la brecha en el mercado local era de 10 puntos porcentuales, ya que el dólar oficial cotizaba a 4,28 pesos; y el paralelo, a 4,72 pesos. En ese mismo momento, en Venezuela la diferencia alcanzaba el 100 por ciento, ya que el tipo de cambio avalado por el gobierno de Chávez era de 4,30 bolívares fuertes y el “lechuga verde” llegaba a 8,50.
Venezuela comenzó en 2003 a imponer controles en el mercado de cambios, ya que debe importar gran porcentaje de los alimentos que su población consume. Desde ese momento, se fueron agudizando las medidas. Por un lado, en los últimos años se prohibió a los medios publicar datos sobre el mercado en negro o paralelo o “blue”. En ese momento surgió la expresión “lechuga verde”. Si bien tampoco se puede mencionar, existen páginas en internet que difunden los valores a los que se intercambian en este mercado los dólares o euros.
En este país, con la puesta en práctica del control de cambio, se había creado la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), oficina encargada de regulación y fiscalización de la compra de moneda extranjera. Este ente analiza cada caso en particular. Tanto las personas físicas o jurídicas debían ingresar sus datos a una página web para luego determinar cuántos dólares o euros podían comprar.
Con la última devaluación, anunciada el viernes, el gobierno puso en funcionamiento un organismo Superior para la Optimización del Sistema Cambiario, que tiene como objetivo evaluar las prioridades para la asignación de divisas. Los venezolanos están a la expectativa de cómo funcionará este nuevo sistema.
Toda devaluación (como también la inflación) produce un efecto inmediato en la transferencia de riqueza. Con la medida adoptada el viernes, el gobierno de Chávez (recluido en Cuba hace dos meses por su enfermedad) intenta reducir el valor en dólares de la deuda interna de 43.000 millones a casi 30.000 millones. Además, busca recibir más divisas por sus exportaciones de petróleo, que significan el 96 por ciento de las divisas. Como contrapartida, el valor de la deuda externa, que según datos oficiales a noviembre de 2012 representaba el 25 por ciento del PBI venezolano, de 320.000 millones de dólares, se engrosa.