A lo largo de las últimas dos décadas, el rugby se ha caracterizado por respetar los ciclos de los entrenadores, etapa que se inicia tras un Mundial y que finaliza en la siguiente Copa del Mundo.
Sin embargo, la realidad pone en jaque el plan de desarrollo que puso en marcha Mario Ledesma en julio del 2018, ya que en la actualidad todos los indicadores disparan un signo de alerta que obliga a dar un fuerte golpe timón.
Si bien Marcelo Loffreda pudo revertir un flojo rendimiento en la Copa del Mundo 2003 con el histórico tercer puesto obtenido cuatro años más tarde, su ciclo entregó en esa etapa evidencias concretas que, pese a algunos sinsabores deportivos, Los Pumas tenían un rumbo definido.
Amparado en un escenario realista y sabiendo que es poco probable que el seleccionado nacional de sus 12 partidos anuales, gane más del 50% por ciento, se espera que el equipo sea competitivo y elabore un plan de juego que pueda sostenerlo en el tiempo, minimizando sus debilidades – sobre todo con la nula gestación de talentos en la primera línea- y maximizando sus virtudes manteniendo sus históricas banderas: una sólida obtención, una férrea defensa y la locura tan característica que surge del ímpetu de calzarse la celeste y blanca.
Hoy todos esos indicadores están en rojo con un equipo que no sumó unidades, recibió 195 puntos en seis presentaciones, marcó 5 tries y concedió su ingoal en 23 ocasiones. En efecto, la situación se profundiza si se toma en cuenta la imposibilidad de encontrar un reemplazante natural a Nicolás Sánchez.
El coach probó en Japón con Benjamín Urdapilleta, pero no lo sostuvo en el tiempo, al punto que se jugó una patriada ante Inglaterra colocando a Jerónimo de La Fuente en esa posición, para luego darle algunas oportunidades esporádicas a Juan Cruz Mallía, Joaquín Díaz Bonilla y Domingo Miotti, antes de recurrir a un nuevo experimento: incluir a Santiago Carreras como número 10.
Este ejemplo expone esa falta de identidad en la conducción del equipo, para un Ledesma que cosecha un 23,5% de eficacia producto de siete partidos ganados, tres igualados y veinte derrotas sobre 30 encuentros, con éxitos destacados sobre Sudáfrica de local y Australia en condición de visitante, ambos precedentes del histórico triunfo sobre los All Blacks en 2020.
En esta temporada ese declive se mantuvo luego de una seria de julio positiva pero no exitosa, en la que se le ganó ajustadamente a Rumania (Tier 2), se empató y superó a los suplentes de Gales y luego se despidió de este Rugby Championship con severos problemas dentro y fuera de la cancha.
Ni el más avezado conocedor de rugby hoy puede explicar una simple pregunta: ¿A qué juegan Los Pumas? Es tan flojo el rendimiento en aspectos esenciales del juego, que muchos jugadores claves mermaron sensiblemente su nivel, a pesar que el entrenador se amparó en la experiencia de Michael Cheika, la sabiduría de Marcelo Loffreda y la buena conexión con el plantel de Juan Fernández Lobbe, sus más íntimos colaboradores.
Ahora se vienen días de descanso, pocos para la situación actual, porque se avecinan los tres test de la ventana internacional de Noviembre: Francia, Italia e Irlanda. Nadie puede asegurar que se pueda triunfar en el Viejo Continente, la última vez que se ganó en Noviembre en Europa fue en 2014 ante un equipo Tier 1 (Francia) y 2017 ante Italia por lo que se impone un nuevo interrogante: ¿podrá torcer en un mes de trabajo lo que no logró en los últimos tres años?
Con el Mundial de Francia en el horizonte, Los Pumas necesitan solidificar las bases esenciales para construir su futuro. ¿Será Ledesma la solución o es tiempo de una profunda refundación?
DATOS
0: Son los puntos que acumuló Argentina en la edición 2021 del Rugby Championship. Seis partidos jugados, sin ninguna victoria, lo mismo sucedió en 2017.
5: Fueron los tries que apoyó Argentina en la edición 2021 del Rugby Championship. Los autores: Thomas Gallo (2), Gonzalo García, Emiliano Boffelli y Pablo Matera, cifra más baja de la historia.
-135: Es la diferencia de puntos con la terminó Argentina la edición 2021 del Rugby Championship. Marcó 60 puntos y recibió 195, en 2013 la diferencia fue de -136, pero ese año se sumaron dos puntos.
