Un gendarme murió y otro salió inconsciente por presunta intoxicación con monóxido de carbono. Esteban Sandino, de 23 años y oriundo de la localidad de Mercedes, Buenos Aires, integrante de la Gendarmería Nacional, fue encontrado sin vida en su habitación, presuntamente víctima de una intoxicación por inhalación de monóxido de carbono.
En la misma habitación, su compañero Leandro Medina, de 24 años, también miembro de la fuerza de seguridad nacional, fue hallado desvanecido y tuvo que ser internado de urgencia en el hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) debido a una aparente intoxicación.
El descubrimiento se produjo alrededor de las 21:50, cuando agentes policiales fueron alertados por Edgardo F., propietario del lugar donde los jóvenes alquilaban habitaciones. Tras recibir un llamado de su hijo, quien les alquilaba el espacio, Edgardo F. informó la situación a las autoridades.
Sandino y Medina fueron encontrados en el suelo, boca arriba. A pesar de los esfuerzos del Servicio Integrado de Emergencia Sanitaria (Sies), Sandino fue declarado fallecido en el lugar debido a una broncoaspiración, mientras que Medina fue trasladado al Heca con síntomas de intoxicación.
La Fiscalía de Homicidios Culposos, a cargo de Marcelo Vienna, tomó conocimiento del hecho y ordenó la presencia de la Policía de Investigaciones en el lugar. Asimismo, se estableció comunicación con Litoral Gas para realizar un informe sobre el funcionamiento de los equipos de calefacción en el domicilio. Posteriormente, personal de la empresa cortó el suministro del servicio como medida preventiva.
En horas tempranas del lunes, el lugar seguía custodiado por patrulleros policiales, mientras se espera el avance de la investigación para esclarecer las circunstancias de esta trágica pérdida.