Mauro Martínez, un segundo involucrado en el crimen de Leonardo Perrone, ultimado a tiros frente a su casa de la zona sudoeste en 2014 al resistir un robo, firmó ayer un abreviado a cinco años y cuatro años de prisión por este caso, aunque en el monto total acumula ocho años, al incluir dos tentativas de homicidio. Originalmente el fiscal Florentino Malaponte le había pedido siete años de cárcel como partícipe secundario en el crimen de Perrone, caso por el cual otro de los acusados firmó un acuerdo a más de una década de cárcel.
Perrone fue asesinado de cinco disparos el 26 de agosto de 2014 en su casa de Riobamba al 4300 cuando resistió una entradera, en la que su padre y su cuñado también recibieron balazos. Los atacantes divisados por las víctimas fueron tres. Horas más tarde, tras allanamientos en la villa de Cerrito y las vías, se produjo una persecución que terminó en forma fatal: un policía ultimó a Walter Asencio en Cabín 9, mientras que su primo Sebastián fue herido en una pierna. Un par de días más tarde se entregó Jonatan A. y fue formalmente acusado por el crimen, tras lo cual firmó un abreviado a 13 años y medio de prisión. En octubre siguiente fue apresado Jonatan Alejandro V., alias Cacha, a quien le imputaron el crimen de Perrone tras ser detenido en Felipe Moré al 2000.
Ahora, Mauro Javier Martínez, asistido por su defensor Rodrigo Mazzuchini, firmó un acuerdo abreviado por un total de ocho años de prisión que se desglosan así: cinco años y cuatro meses como partícipe secundario del crimen de Perrone y, el resto, por dos tentativas de homicidio. Martínez, entonces de 24 años, fue apresado cerca de su casa, en Ituzaingó y Servando Bayo, en septiembre de 2015 por dos ataques armados y luego sumó imputación por el caso Perrone, por el que ya estaba bajo sospecha al ser arrestado. Una de esas agresiones fue en agosto, cuando un pibe de 14 años, acompañado por otros dos, le metió un escopetazo en Servando Bayo y Riobamba a Sebastián L., de 24, como parte de una pelea entre clanes, luego de que le prendieran fuego la vivienda. Un mes antes, un niño de 9 años, primo de Martínez, fue baleado Cerrito al 4400, en el mismo barrio, luego de que Martínez intercambiara disparos con el mismo Sebastián L., quien también se encuentra detenido por esta agresión.
