La situación del grueso de los trabajadores de la firma Gemplast, cuyas instalaciones quedaron destruidas por un incendio el 25 abril pasado, es “crítica”. Esa es la definición que entregaron desde el sindicato que agrupa a los obreros de la industria plástica local.
La mayoría de los empleados de la compañía ubicada en zona sudoeste sigue percibiendo apenas algunos subsidios estatales que, en rigor, en algunos casos ni siquiera se han abonado al día de hoy.
El incendio de Gemplast se produjo en la madrugada del sábado 25 de abril, cuando sólo una decena de los 240 empleados directos trabajaba en el inmenso galpón de 20 mil metros cuadrados que está en avenida Las Palmeras y Presidente Perón, en el límite entre Rosario y Pérez.
La destrucción fue casi total. Desde la empresa valuaron las pérdidas en 40 millones de dólares y señalaron que lo que el fuego consumió fue justamente el sector productivo de la fábrica.
Gemplast provee elementos a gran parte de la industria de helados y de pinturas del país. La firma abastecía antes del incendio el 70 por ciento de los recipientes plásticos por inyección que se utilizan en las heladerías argentinas.
Según manifestaron los titulares de la firma, la idea es volver a poner en marcha la fábrica e ir retomando la producción gradualmente hasta llegar con el tiempo al nivel actividad que tenía previa al siniestro.
El fuego afectó a más de 80 equipos destinados a la producción y actualmente Gemplast trabaja con entre 8 y 10 máquinas inyectoras de terceros (en otras empresas). Y en su planta lo hace con una inyectora cero kilómetro que todavía no había ingresado a producción y por eso se salvó de las llamas.
En ese marco, en diálogo con este medio, el secretario gremial de la delegación Rosario del Sindicato Unión Obreros Plásticos, Mario Celis, dijo que la empresa ya reincorporó en estas últimas semanas a unos 60 operarios.
Sin embargo, la mayoría de los trabajadores que está fuera ha quedado a la deriva y sin demasiado tiempo para seguir esperando. El gremialista detalló que algunos están buscando nuevo empleo, mientras que otros se han reubicado en otras firmas, muchas de la misma industria plástica.
“A medida que algunas empresas le van pidiendo trabajadores al sindicato vamos hablando y el que tiene intención de pasar a otra firma lo hace. Por ejemplo, una empresa de Villa Gobernador Gálvez tomó hace poco a diez operarios que estaban en Gemplast”, señaló.
De todas formas, insistió, la mayoría sigue desempleado e incorporado al programa nacional Repro (de 2 mil pesos mensuales) y también recibe un subsidio del la provincia de 1.800 pesos, además de una exención en los impuestos.
Eso es lo que se había acordado a los pocos días del siniestro. Sin embargo, uno de esos aportes todavía no se cumplió; Celis sostuvo que aún no se abonaron los Repros de junio.
“No se pudo encuadrar bien la situación de la empresa al principio, ya que ese subsidio es para firmas que están en crisis. Ese pago se postergó y los trabajadores lo percibirán recién en julio”, explicó.
Lo cierto es que el tiempo pasa y todo se hace más angustiante. El dirigente gremial dijo que la situación de la mayoría de los trabajadores es “crítica”.
“Date cuenta. Con menos de 4 mil pesos no es fácil vivir. Una persona que estaba ganando 10 mil pesos ahora se encuentra con algo mucho menor, Nosotros desde el sindicato estamos tratando de darle una solución al tema. Pero nunca es fácil quedarse sin trabajo”, concluyó Celis.
