El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, denunció ayer que la imputación de la presidenta Cristina Kirchner forma parte de una “estrategia de golpismo judicial activo” tendiente a desestabilizar al gobierno. En tanto, dirigentes opositores destacaron la “gravedad institucional” que genera el pedido de imputación que realizó el fiscal Gerardo Pollicita.
“Observamos una estrategia de golpismo judicial activo, una estrategia de desestabilización. Es golpismo judicial activo porque la denuncia (acusando a la presidenta de proteger al terrorismo) no persigue una finalidad judicial sino política”, denunció Capitanich.
El jefe de ministros señaló que la imputación realizada a partir de la denuncia del fallecido fiscal de la causa Amia, Alberto Nisman, “no tiene ningún tipo de validez jurídica porque no existen pruebas ni siquiera indiciarias de culpabilidad” y agregó que “es necesario que el pueblo sepa que se trata de una enorme operación, de una estrategia de desestabilización política para ocultar a los verdaderos autores del hecho”.
“Se pretende asociar a este gobierno con un hecho que enluta al pueblo argentino (el ataque a la Amia), pero los fracasos sistemáticos y reiterados en la investigación corresponden a la Justicia”, expresó.
En conferencia de prensa en Casa de Gobierno puntualizó que existe en el mundo una disputa entre lo que puede considerarse poder visible, basado en las democracias y otro basado en presiones corporativas y denunció que “las democracias son debilitadas por estrategias arteras de grupos concentrados”.
“No nos oponemos al capital, nos oponemos al capital que se convierte en oligarquía para disputarle poder al Estado”, señaló.
En el mismo sentido, el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, dijo que la imputación “carece de todo valor jurídico” y que es “una clara maniobra de desestabilización antidemocrática”.
“Es una clara maniobra de desestabilización la generada por este fiscal. La denuncia de Nisman es un bodoque y en esa presentación no hay un sólo delito”, sostuvo al ingresar a la Casa Rosada.
“Gravedad institucional”
Desde la oposición, el titular de la UCR y senador nacional, Ernesto Sanz, calificó como “una cosa muy grave” que la presidenta haya sido imputada por presunto “encubrimiento del terrorismo” y consideró que “se requiere mucha responsabilidad, mucha serenidad y rapidez en el esclarecimiento del caso”.
La socialista Alicia Ciciliani reflexionó que “está bien que cualquier ciudadano, por más del cargo que tenga, esté obligado a rendir cuentas” y remarcó que la presidenta “tendrá la oportunidad de demostrar ante la Justicia que es inocente”.
Laura Alonso, diputada por Unión PRO, afirmó que es de “una suma gravedad institucional” la imputación contra la presidenta y remarcó que “ahora hay que dejar que el juez y el fiscal que entienden en esta causa trabajen sin presión ni interferencias”.
En tanto, el diputado y precandidato presidencial por el Frente Amplio Unen (FAU) Julio César Cleto Cobos sostuvo que “no es normal tener un país con un vicepresidente procesado y una presidenta con un pedido de imputación”, en alusión a Amado Boudou y a Cristina Fernández.
El presidente del bloque de diputados de la UCR, el cordobés Mario Negri, afirmó que “si la democracia y las instituciones funcionan, una imputación sobre el presidente no busca golpes de Estado, obliga celeridad para conocer la verdad”.
Mientras que el titular del bloque de diputados por el Frente Renovador, Darío Giustozzi, aseguró que “es muy grave tener al vicepresidente procesado y ahora a la presidenta imputada. Un ciclo político con un desenlace desbastador”.
“Encontramos nueva evidencia”
Una nueva inspección ocular se realizó ayer en el departamento del fallecido fiscal Alberto Nisman, en la que los peritos de la querella hallaron “nueva evidencia” que no había sido tomada en cuenta anteriormente. Del procedimiento participaron además peritos de la Policía Federal; la fiscal Viviana Fein; ex esposa de Nisman, Sandra Arroyo Salgado; la madre del fiscal, Sara Garfunkel; el decano del Cuerpo Médico Forense Roberto Luis María Godoy.
Daniel Salcedo y Osvaldo Raffo, los peritos designados por Arroyo Salgado, recorrieron el departamento en el que apareció muerto Nisman. “Encontramos algunas evidencias que no habían sido tenidas en cuenta. Hay elementos nuevos que no podemos socializar aún. Hay evidencia física que se ha levantado para mandar a los laboratorios para ver de quién se trata, a quién pertenece y cuál es la data”, dijo Salcedo. Y agregó: “Es la primera vez que se hacen estas pruebas. No lo habrán considerado necesario. Hoy se hizo una inspección ocular, un reconocimiento de un lugar que no conocíamos. Trabajamos con distintos reactivos, luces forenses, luminol –que busca rastros de sangre– y se realizaron fotos, filmaciones y nuevos planos”.