Un amigo de Eugenio Veppo, el periodista que atropelló y mató a una agente de tránsito y provocó graves heridas a otro en 2019 en el barrio porteño de Palermo, complicó este viernes en el juicio al imputado al afirmar que le advirtió que había atropellado y «probablemente matado» a dos personas y no paró para asistirlas y si bien reconoció que habían ingerido alcohol en las horas previas, fue contradictorio con las cantidades que ingirió el acusado.
Se trata de Alberto Alejandro Aznar, quien declaró vía la plataforma virtual Zoom en la segunda jornada del debate en el que Veppo es juzgado por «homicidio simple con dolo eventual» por la muerte de Cinthia Choque, de 28 años, y por las «lesiones graves» que sufrió su compañero, Santiago Siciliano, de 31 años, la madrugada del 8 de septiembre de 2019.
Al iniciar su testimonio ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 14, integrado por los jueces Domingo Luis Altieri, Hugo Norberto Cataldi y Silvia Mora, Aznar explicó que era amigo de Veppo “hace más de 15 años”, aunque luego aclaró que después del hecho nunca más tuvo contacto con él ni lo fue a visitar a la cárcel, y relató las horas previas al hecho.
Explicó que la noche previa invitó a Veppo y a su entonces novia, Camila Villaverde, a la casa en Colegiales de otro amigo de nombre Kevin a comer un asado y que en esa cena abrieron solo una de las dos botellas de vino que había “para brindar” y la tomaron entre los cuatro.
Recordó que alrededor de las 1.30 de la madrugada, el anfitrión les dijo que se iba a dormir y Veppo, Camila y él se retiraron a la casa del periodista y que el plan era ir más tarde a bailar al boliche “Jet” de la costanera norte.
En lo de Veppo, Aznar contó que “había música” e hicieron “una especie de previa” donde “se sirvieron tres shots de whisky”, pero aclaró que él no había tomado ninguno y que no puede afirmar con seguridad si su amigo consumió, pero, por lo que cree ahora, lo más probable es que los haya ingerido solo su novia Camila “por el estado en el que quedó”.
Esta afirmación ocasionó que tanto el fiscal de juicio, Fernando Klappenbach; como el abogado de la querella, Andrés Gramajo; y el presidente del tribunal, el juez Altieri, le llamaran la atención a Aznar por una contradicción con su declaración de instrucción, donde había afirmado que tanto Veppo como Camila tomaron el whisky y que en el asado el periodista había tomado “un par de copas” y no sólo una.
También le recordaron que en instrucción declaró que, cuando Veppo toma “se transforma”, y este viernes afirmó que esa madrugada su amigo “estaba en condiciones de manejar” y que no lo notó alcoholizado, pero sí “desinhibido”.
“Entre las dos versiones, ¿con cuál nos quedamos? Tome con seriedad lo que está declarando”, le advirtió el juez, ante lo cual Aznar ratificó la versión de este viernes y aseguró que en la instrucción se sintió “presionado” y “sobrepasado” y que además estaba “enojado” con Veppo por todo lo que había sucedido.
El joven explicó que tras permanecer en lo de Veppo, se fueron a la casa de Camila a Balvanera para que se cambie y de allí sí fueron en el Volkswagen Passat que su amigo acababa de comprar el día anterior, rumbo al boliche.
“No tengo constancia de la velocidad que íbamos, pero veníamos más rápido que los otros autos. Cuando se cruzaba un auto, para no impactar, nos cruzábamos de carril”, dijo Aznar, al reconocer que Veppo conducía con exceso de velocidad y haciendo zigzag para pasar los autos sobre avenida Figueroa Alcorta.
Al relatar el momento del hecho, contó que iban “en línea recta” cuando se les “cruza un taxi” y para evitar un choque Veppo primero giró a la izquierda y luego a la derecha.
“Ahí es cuando recién, lamentablemente, nos vemos con el control del tránsito e impactamos contra Santiago y Cinthia. En ese momento yo supe desde el primer momento que lo que habíamos impactado eran personas”, afirmó el testigo que viajaba en el asiento del acompañante.
“Automáticamente, lo primero que le digo a Eugenio es ‘¿vos sos consciente de que esto es lo peor que nos pasó en la vida? ¿Qué es muy probable que hayamos matado a dos personas con la gravedad del impacto?”, continuó.
Aznar aseguró que cuando le dijo eso, Veppo “entró en estado de shock” y “no paraba de decir ‘¡no, no, no, no puede ser, no, no no!’”.
“La realidad es que nos sobrellevó la situación. No supe cómo manejarlo, me asusté mucho, en todo momento pedía de volver pero yo no estaba al volante y él estaba en un estado de shock”, agregó en referencia a que su amigo no paró de conducir ni regresó al lugar del hecho pese a lo que él le pedía.
En otro tramo del testimonio, Aznar defendió a su amigo al afirmar: “Él jamás tuvo la idea de matar a nadie. Sería incapaz de hacerle mal a nadie. Fue una maniobra irresponsable que derivó lamentablemente en un accidente fatal”.
El testigo recordó que abandonaron el auto en la calle Ruggeri de Palermo y que de allí se tomaron un taxi a la casa de Veppo, donde el imputado lloraba, discutieron, él le pidió que se pusiera a disposición de la justicia, habló con un abogado y más tarde se presentó en la comisaría.
En el juicio, que continuará la semana que viene, declararon otros testigos como dos taxistas, una remisera y un subcomisario.