El neurólogo José María Vincenti indicó que la operación a la que debe someterse la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por su cuadro de colección subdural crónica es “relativamente sencilla” y que a la intervención “se le está dando trascendencia que no tiene” por el hecho en sí, sino que toma importancia por la persona de quien se trata, que es la jefa de Estado.
En diálogo con El Ciudadano, Vincenti explicó: “En la medida en que pasan los años, el cerebro no ocupa toda la cavidad del cráneo, sino que flota en un líquido cefaloraquídeo. Si hay un golpe o desaceleración brusca, eso genera la ruptura de vasos que unen el cerebro con la membrana dural que está pegada a la calota craneana. Ese espacio, que es habitualmente virtual, se transforma en real a través de la hemorragia”.
“Esa hemorragia se autolimita rápido, pero la sangre que queda en ese espacio se degenera, va solventándose y genera una colección o hematoma, que puede ser agudo antes de la semana, subagudo o crónico pasando de un mes”, agregó.
Vincenti explicó que “lo que predisponen esto es un traumatismo o se puede dar en personas que están tomando anticoagulante”. De todos modos aclaró que “no necesariamente tiene que haber sido por un golpe fuerte, sino que pudo ser algo banal, pero que movilizó el cerebro estratégicamente. En algunos casos no se reconoce ni siquiera ningún traumatismo que lo haya ocasionado”.
“Las opciones ante todo son el control, en la medida que no aumente de presión intracraneana, ni que aparezcan déficit neurológicos, por ejemplo motores. A partir del control se puede ver cómo se comporta, se puede esperar a que se reabsorba o adelantarse y hacer una operación”, expresó el neurólogo.
“Es una cirugía relativamente sencilla, que consiste en hacer un orificio en la calota craneana, en la proyección del hematoma, lavar para que no queden restos de sangre donde está ubicado el hematoma y dejar un drenaje durante dos o tres días. Esta intervención no tiene secuelas, ni consecuencias”, dijo sobre la operación.
“El reposo que tiene que realizar es relativo, tenés que tener el cuidado pertinente de no hacer movimientos bruscos. En ese reposo no tiene que estar en cama. Sí uno o dos días en cama luego de la intervención, pero más tiempo no porque acostado, por la posición, tiende a defenderse. Hay que facilitar seguir drenando y hacer un reposo mitigado”, expuso.
“Se está dando una trascendencia que no tiene, sino que toma importancia por la persona de la que se trata, que es la presidenta de la Nación”, finalizó.