“Damos el debate para salvar las vidas que se lleva el 67 por ciento de los siniestros. La perspectiva que se avecina es que si no tomamos medidas, el problema se agravará en los próximos años”, subrayó el ministro de Seguridad de la provincia, Raúl Lamberto, al encabezar, ayer, la presentación en Rosario del Plan Provincial de Seguridad Vial para Motovehículos que comprende estrategias para abordar la alta tasa de siniestralidad que involucra a motociclistas no sólo en las grandes urbes sino en todo el territorio santafesino.
Según se informó, el plan es el resultado de una elaboración de los Consejos Regionales entre 2012 y 2013, tiene como objetivo reducir el número de víctimas fatales, la gravedad de las lesiones y el número total de los siniestros de tránsito con motos.
En Santa Fe, en el último lustro el parque vehicular de motos experimentó un importante salto y su crecimiento fue marcadamente mayor al de los autos. Según cifras oficiales, en 2007 circulaban por la provincia 528.171 autos y 285.868 motos; mientras que en 2012 la cifra fue de 729.990 autos y 571.647 motos. Es decir, en sólo cinco años los vehículos de dos ruedas pasaron de ser el 26,1 por ciento del total a ser el 34,1. Y la tendencia, de seguir así, es a que en una década más haya igual cantidad de autos que de motos.
De hecho, en 2008 en la provincia se registraban 11 motos por cada 100 habitantes, mientras que el año pasado eran casi 18 los motovehículos por cada 100 personas. Se trata de la incidencia más alta del país: los dos puestos siguientes, Córdoba y La Rioja, aparecen bastante más atrás, con 155 motos por cada mil habitantes.
Pero al mismo tiempo que crecía el número de motos se disparaban las estadísticas de siniestros viales. En los hechos con víctimas fatales, los motociclistas pasaron de ser el 25,2 por ciento en 2007, a ser el 45,1 el año pasado.
Para peor, en más de la mitad de los hechos en los que participaron motos –51,9 por ciento– su conductor no utilizaba casco.
Y además, en los siniestros con motos, las víctimas suelen ser personas de corta y mediana edad. Y el 66 por ciento de los conductores protagonizó al menos uno.
“En muchas ocasiones la causa de la pérdida de vida o lesión grave radica en la no observancia de la normativa prevista para la circulación de estos rodados, en especial la no utilización de los elementos de seguridad, el exceso de ocupantes o la falta de capacitación”, remarcó Lamberto, quien presentó el plan junto al subsecretario de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, Mariano Cuvertino, y su par de Movilidad de Rosario, Mónica Alvarado. También participó la intendenta de Funes, Mónica Tomei.
El plan se aplicará desde el Estado provincial junto con municipios y comunas, organizaciones civiles y la sociedad misma, y procurará a través de distintas herramientas modificar conductas de riesgo. En esa línea, se expuso como uno de los agravantes la “escasa conciencia del riesgo” a que están expuestas las motos, muchas veces por simple carencia o deficiencia de infraestructura urbana o de rutas para su desplazamiento. “No obstante, un alto porcentaje de accidentes de motociclistas se producen por la gran imprudencia de sus conductores”, puntualizó Lamberto.
Con todo, a las acciones tradicionales –que se seguirán realizando– se sumará infraestructura y obra pública –mejoramiento de caminos, señalética específica– y aun circuitos para práctica y aprendizaje en la conducción, que tendrá, además, cursos para estar al mando de motos, entre otras medidas. “El propósito es revertir la situación de esfuerzos aislados que muchos actores han tomado en cuanto a la tarea del control de la circulación, las campañas de concientización y prevención, que sin dejar de ser efectivos no tienen el impacto que se merece la problemática”, marcó el ministro sobre el plan, que llevará la misma impronta a toda la provincia.
