El nuevo salvataje aprobado por el gobierno español a Bankia para evitar su quiebra supera lo esperado y se convierte en el mayor de la historia del país. Con 23.465 millones de euros, la intervención de Mariano Rajoy en pro de salvar a uno de los mayores bancos significa hasta el momento una cifra que representa el 63 por ciento de los recortes realizados al presupuesto general del Estado. Bankia es el cuarto banco y representa el 10 por ciento del sistema financiero español, pero los expertos insisten en que España se verá obligada a pedir el auxilio europeo para recapitalizar el resto de su banca.
Parte de las nuevas necesidades de capital que afloró el viernes pasado en Bankia derivan de que debe ampliar la cobertura, es decir reservar dinero, para afrontar pérdidas potenciales por impagos en créditos hipotecarios y préstamos a las empresas, dada la intensidad de la recesión, según publicó el diario madrileño El País.
Es un ejercicio similar al que harán los evaluadores externos al examinar el conjunto de la banca. Es también un ejercicio que llevan haciendo semanas servicios de estudios y centros de análisis extranjeros.
El Instituto de Finanzas Internacionales, la organización que representa a la gran banca internacional, aseguró esta semana que la banca española podría verse forzada a cubrir hasta 260.000 millones de euros en pérdidas potenciales. Tras las reformas del gobierno, al sector se le exigen unos 190.000 millones en provisiones, lo que sería a todas luces insuficiente.
De tal manera, España se vería obligada a pedir el auxilio europeo, a pesar de que las autoridades del gobierno de Rajoy negaron esa posibilidad durante toda la semana.
La entidad financiera Bankia, recientemente nacionalizada para evitar su quiebra, solicitó al gobierno español una ayuda adicional por 19.000 millones de euros (23.800 millones de dólares), que se suma a los 4.465 millones comprometidos en 2010, para impulsar el saneamiento de la entidad que debió ser estatizada a raíz de la bancarrota causada por los impagos en los créditos hipotecarios.
El plan para impulsar el saneamiento y recapitalización de la entidad especializada en el mercado hipotecario fue presentado por el nuevo presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, al consejo de administración de la entidad, que le dio su visto bueno, y que se solicitará formalmente al Banco de España.
Se trata del mayor importe de ayuda pública que recibirá una entidad para su saneamiento en toda la historia de España, pese a que el gobierno español sostuvo recientemente que el esfuerzo público para culminar la reestructuración financieras no superaría los 15.000 millones de euro. La petición desborda en una sola entidad la previsión máxima que el ministro de Economía Luis de Guindos formuló hace sólo dos semanas para todo el sector financiero por efecto del segundo decreto de reforma.
Además, la matriz procederá a capitalizar su filial Bankia, con una ampliación de capital de 12.000 millones de euros. Esta solicitud se produjo después de que Bankia reformulara las cuentas anuales, individuales y consolidadas, correspondientes al ejercicio 2011, tras una revisión en profundidad de la cartera crediticia, informó la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Así, Bankia elevará la cobertura por el riesgo del lastre hipotecario al 48,9 por ciento, al estimarse que el banco dispone de activos tóxicos en el sector inmobiliario por unos 32.000 millones de euros. Está previsto que el proceso de nacionalización quede concretado tras superar distintas fases, en octubre próximo.
