El Estudio Jurídico Farina y Asociados es una estructura que representa en mucho la experiencia de los distintos negocios y empresas familiares de la Argentina, las que, durante generaciones, apuestan al futuro brindando lo mejor de sí para con el mercado y con un sello distintivo.
El Estudio nació en 1949 de la mano de Juan María Farina, y con el tiempo se incorporaron su hijo Guillermo y luego, en 2002, el abogado Sebastián Farina, logrando que tres generaciones compartan no sólo cuestiones familiares, sino los distintos desafíos jurídicos.
Si bien la estructura siempre se fue aggiornando a las nuevas modalidades y circunstancias, el estilo se mantuvo: una estructura familiar, confiable y especializada, capacitada para brindar una asesoramiento personalizado y sumamente artesanal; para lograr estrategias, esquemas y soluciones signadas por la originalidad.
El Estudio tradicionalmente se especializó en temas comerciales, sobre todo en materia societaria, concursal y contractual y,en este último tiempo, se hizo especial foco en las cuestiones ambientales y el impacto de la Inteligencia Artificial en las relaciones económicas. Para ello se consolidó un equipo interdisciplinario inspirado en los mimos principios que nutrieron al Estudio desde sus comienzos.
Las empresas y todas las estructuras, de un modo u otro, atraviesan los mismos desafíos que se presentan en la «vida». Con momentos buenos y no tan buenos. Del mismo modo que pasa en la vida, cuando se aborda una cuestión jurídica, es posible que dicho abordaje tenga repercusiones en otros aspectos no contemplados, por lo que resulta importante que sea un mismo equipo el que pueda abordar el tratamiento requerido.
Esta es una pauta diferenciadora del Estudio Farina, ya que procura comprender desde la perspectiva jurídica, de modo personalizado y mediante su equipo (sin derivaciones) el tratamiento de las cuestiones que se le encomiendan de modo integral y no como si fueran compartimentos estancos.
Siguiendo este razonamiento, las distintas problemáticas y desafíos de estos tiempos también nos exigen un análisis comprensivo de lo «estrictamente jurídico» y contemplando simultáneamente la cuestión ambiental e incluso la incidencia de la Inteligencia Artificial.
Actualmente, la sede del Estudio Farina y asociados se encuentran en la Ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe, y también cuenta con oficinas en Buenos Aires e incluyen una red de corresponsales que mantienen cubiertas las necesidades de sus clientes en diversos puntos del país.
¿Cuáles son los desafíos para lo que viene?
El mundo hoy atraviesa una enorme revolución tecnológica de la mano de la Inteligencia Artificial. Naturalmente, ello tiene enorme incidencia en las cuestiones tradicionales y cotidianas, por lo que necesariamente el área legal debe entender este fenómeno y comprenderlo de modo tal que, la aplicación de las leyes no obstaculice su implementación, y al mismo tiempo, que su implementación no afecte ni menoscabe normas indisponibles.
En forma simultánea a este fenómeno, y de modo sumamente afortunado, cobró especial protagonismo la visión ambiental de la vida, incluso, habiéndose declarado el derecho a un ambiente sano, como derecho humano.
Por ello consideramos que el desafío que viene -y no sólo desde la perspectiva jurídica- es la integración de estas cuestiones de un modo sostenible.