El Súper Sábado en el Seis Naciones finalmente llegó y con él viene una gran cantidad de drama potencial en cuanto a las matemáticas y estadísticas después de una cuarta que dejó hipotéticamente hablando, todo abierto. La jornada comienza en Cardiff con la disputa por evitar la cuchara de madera o último puesto, entre Gales e Italia desde las 11. Luego en Dublín, Irlanda recibe a Escocia, a las 13.15 y el último partido en Lyon, con el clásico: Francia vs. Inglaterra, a las 17. Toda la fecha se verá por Star+.
Análisis de la última fecha
Tanto Irlanda como Escocia fueron víctimas del caos que se produjo el último partido, con el equipo de Andy Farrell siendo enterrado por un drop de Marcus Smith y el equipo de Gregor Townsend perdiendo ante los Azzurri en Roma.
Los sorprendentes resultados de la cuarta ronda dejaron abierta la competición con cuatro equipos al alcance matemático del título, aunque Irlanda todavía muy cerca de levantar nuevamente la Copa, ya que sólo necesita un punto para asegurar el Seis Naciones. Eso podría ser desde perder por siete puntos hasta anotar cuatro tries, empatar o ganar.
Para Escocia, la ecuación es mucho más complicada, ya que necesitan vencer a Irlanda por 39 puntos y evitar que obtengan punto el seleccionado del trébol, lo que en el Estadio Aviva el fin de semana de San Patricio sería toda una hazaña.
Farrell se sentirá frustrado por la derrota del fin de semana pasado y lo mejor es que Irlanda saldrá muy motivado después de una semana de reenfoque. Por supuesto, la Escocia de Townsend será prudente y hará todo lo posible para sacudir el barco irlandés.
Es justo decir que antes de sus respectivos partidos contra Irlanda y Gales, Inglaterra y Francia habían atravesado un torneo bastante desfavorable. Ambos habían mostrado una imagen un poco pobre en lo colectivo más allá de sus individualidades pero sí llenos de errores, culminando en actuaciones terribles contra Escocia e Italia a finales de febrero.
Los dos entrenadores, Steve Borthwick y Fabien Galthie, estaban bajo mucha presión, y la posición de este último fue objeto de especial atención.
Afortunadamente para Galthie, pudo dormir profundamente el domingo por la noche después de vencer a los galeses para volver a la normalidad. De hecho, fue cómodamente su mejor actuación desde su eliminación en la Copa del Mundo, ya que se prepararon muy bien para Le Crunch.
Los debutantes de Les Bleus, cuatro de ellos en Cardiff, tuvieron un rendimiento admirable y, como conjunto, parecían mucho más seguros. Si los franceses son capaces de respaldar esto, se sabrá en el ‘Super Sábado’.
Ésa es también una pregunta que ronda en torno al conjunto de la rosa en este momento, dada su repentina mejoría contra Irlanda. Si bien hubo alguna que otra señal prometedora, junto con la intención obvia que habían mostrado en sus primeros tres partidos, su victoria sobre los campeones defensores fue un gigantesco salto adelante.
Pero nuevamente, todo se reduce a la coherencia. Puede que no haya títulos disponibles cuando comience el partido en Lyon (eso lo decidirá Irlanda en última instancia), pero hay mucho en juego y la presión recae sobre ambos planteles de jugadores y entrenadores.
Una mala actuación, seguró servirá de muchas crítitcas, pero una victoria dejará a los fanáticos soñando con lo que pueden lograr en el futuro.
Si ambos equipos aprovechan lo que mostraron el fin de semana pasado, entonces se puede decir que habrá un cierre de competencia emocionante en el Seis Naciones que ha cobrado vida en la segunda mitad del torneo.
Para Gales, la perspectiva de una temporada sin victorias, un destino que sufrieron por última vez hace 21 años, cobra gran importancia. Una repetición de 2022, cuando los azzurri consiguieron una victoria histórica sobre el equipo galés entonces liderado por Wayne Pivac, también marcaría el peor resultado de Warren Gatland en el Seis Naciones. Serviría como un claro recordatorio de los desafíos que ha enfrentado Gales el año pasado.
El inexperto equipo galés estuvo muy cerca de Escocia e Inglaterra en sus dos primeros partidos del Seis Naciones, pero fue derrotado por Irlanda en el tercero y arrasado por Francia.
Mientras que para la Azzurra ha sido un comienzo maravilloso en la vida con el nuevo entrenador Gonzalo Quesada. Cayeron por tres puntos ante Inglaterra, empataron con Francia y derrotaron a Escocia. Si bien tuvieron un problema contra Irlanda tras ser goleado en Dublín, llegan al último partido con la oportunidad de terminar en su puesto más alto en el Seis Naciones: tercero.
La decisión de cambiar de entrenador en 2024 aparentemente ha valido la pena para los azzurri, que parecen estar en camino de evitar ser el último seleccionado en la tabla por novena temporada consecutiva mientras se enfrentan cara a cara con un Gales lleno de energía y con todo el apoyo de su público.