La Justicia avanza con el juicio a dos jueces, un secretario de juzgado, un martillero y un empleado bancario acusados de 88 estafas en 2010. Los acusados son el ex juez Alejandro Pedro Martín –quien estuvo a cargo del Juzgado Civil y Comercial de la 17ª nominación–, Ricardo Lavaca (secretario), el ex juez Jorge Scavone, el martillero Oscar Kovalevski y un empleado bancario. Se tramitará de modo escrito en el Juzgado de Sentencia II a cargo de María Isabel Mas Varela. El fiscal Carlos Covani pidió tres años de prisión para Lavaca, Scavone y el empleado del banco; y cinco años de mínimo para Kovalevski y Martín. El investigador presentó 120 documentos falsos hechos por el juez y el secretario. Según la Fiscalía son 33 defraudaciones desde el juzgado de Scavone y 55 desde el de Martín.
Largo recorrido
La estafa se conoció en 2012. El juzgado de Martín había librado 56 oficios de cobro por un valor de más de un millón de pesos de distintas cuentas de otras sedes judiciales custodiadas por el Banco Municipal. La jueza Mónica Lamperti encontró que buena parte del faltante quedó en manos de tres abogados y un martillero público. La suposición es que recibieron el dinero a través de pagos librados por la entidad financiera.
La cabeza y las partes
El organizador del grupo era el martillero Kovalevski, que operaba con varios abogados que ya recibieron condena en un juicio abreviado y devolvieron parte del dinero. Después la Justicia imputó al ex juez Jorge Scavone por participar en una asociación ilícita que cobraba de manera irregular fondos depositados en cuentas judiciales. Scavone estuvo al frente del juzgado Civil y Comercial Nº 1 hasta diciembre de 2010, cuando se jubiló. La denuncia que presentó el Banco Municipal de Rosario en su contra se formuló a fines de diciembre de 2012, unas pocas horas antes de que se iniciara la feria judicial.
La investigación del fiscal Covani corroboró que se dictaron 56 medidas desde el Juzgado Civil y Comercial Nº 17 que por distintas vías permitió retirar los fondos desde el Banco Municipal. En el caso de Scavone fueron 33. Las maniobras comenzaron a detectarse a mediados de 2010, en la misma época en que se inició la transferencia de depósitos judiciales del Nuevo Banco de Santa Fe al Municipal.