La controversia diplomática por la exploración hidrocarburífera en las islas Malvinas subió ayer de tono cuando la Argentina acusó a Londres de agitar el “fantasma militar” en respuesta a una declaración del Reino Unido que repuso el discurso belicista en el centro del conflicto.
A través del diario londinense Financial Times, el gobierno británico rechazó ayer el reclamo de Buenos Aires por la inminente exploración unilateral en el archipiélago y si bien dijo que había pocas posibilidades de una incursión militar argentina, sostuvo que estaba “alerta”.
Ante ello, la Argentina volvió a advertir sobre la “ilegalidad” y las futuras “consecuencias jurídicas” de la exploración para las empresas que se involucren en el proyecto y deploró que Londres apele al “fantasma militar” para correr el eje de la discusión hacia otro plano.
“Apelando al fantasma militar, lo que el Reino Unido hace es dejar más en evidencia la verdadera realidad: la disputa de soberanía existe, es un hecho de la realidad, como lo es la ocupación ilegítima de parte del territorio nacional argentino”, señalaron fuentes de la Cancillería.
El argumento legal de la diplomacia argentina, que conduce el canciller Jorge Taiana, se basa en que algún momento un tribunal internacional dictaminará a favor del reclamo de soberanía y en ese momento las empresas deberán hacerse cargo de las regalías no pagadas al país.
“Queda claro que no puede existir seguridad jurídica en entorno geopolítico con una disputa de soberanía internacionalmente reconocida y pendiente de solución, lo cual es abiertamente desafiado por el Reino Unido con este accionar ilegal y unilateral”, precisaron.
Por ello, sostuvieron que “no es casual que las empresas petroleras involucradas sean británicas, es decir, las únicas que pueden llegar a creer al Reino Unido la quimera que vende sobre la supuesta legalidad de las operaciones comerciales”.
Londres autorizó a realizar explotaciones a cuatro compañías entre las que tomó la delantera Desire Petroleum que tiene previsto comenzar este mes con la búsqueda de crudo en el Mar Argentino a través de la plataforma Ocean Guardian, contratada por la compañía al holding Diamond Drilling.
El martes pasado, el gobierno argentino presentó ante el Reino Unido su “más enérgica” protesta por la perforación hidrocarburífera que está a punto de comenzar en el archipiélago.
Si bien el vocero de la embajada británica en Buenos Aires ya había sentado la posición del Reino Unido, ayer uno de los diarios más influyentes, el Financial Times, publicó declaraciones de una fuente diplomática que señaló que hay escasas posibilidades de que la Argentina intente una acción militar, pero están “alertas” ante los próximos acontecimientos.
Según publicó el diario, la sede del gobierno británico “rechazó ceder ante la protesta argentina por los planes de comenzar trabajos de exploración petrolera y gasífera”.
“El 10 de Downing Street (residencia del primer ministro, Gordon Brown) rechazó la protesta argentina”, publicó el matutino londinense.