No conformes con lo convulsionada que habían dejado en la casa de Gran Hermano con el ingreso de cinco jugadores y jugadoras nuevas al reality, sumados a quienes ingresaron por repechaje, la producción del reality volvió a poner en juego el teléfono rojo que cambió por completo la placa de nominados. Este domingo un “hermanito o hermanita” abandona la casa.
La semana en Gran Hermano fue convulsionada. El lunes ingresaron siete participantes, dos en repechaje y cinco nuevos.
El jueves hubo una nueva gala de nominaciones en la que quedaron en placa Sabrina, Isabel, Bautista y Joel. En ese contexto el telefono rojo volvió al juego. Sonó, atendió Joel y tuvo que agregar a dos nominados a la placa y se decidió por Martín y Nicolás. Después el líder, Emmanuel, utilizó su potestad para sumar a Cata, y luego sorprendió a todos al salvar a Martín, cuando se esperaba que podía hacerlo con su amigo Joel.
En el medio, Gran Hermano decidió expulsar a Isabel, quien había reingresado por el repechaje, tras incumplir con el reglamento del reality.
La placa final del juego quedó integrada por Sabrina, Bautista, Joel, Cata y Nicolás
La falta de Isabel
La ahora exparticipante, Isabel venía de ser nominada la semana pasada por hablar del afuera, y al reincidir en esto que viola el reglamento del reality, Gran Hermano decidió su expulsión. El detonante fue que Isabel le habló a Furia del supuesto “aguante” que tiene Rosina afuera del reality.