El piloto alemán Sebastian Vettel (Red Bull) afronta con ilusión el regreso del Mundial de Fórmula 1 en el Gran Premio de Bélgica, en un circuito exigente donde la meteorología puede ser clave en el resultado final.
«El circuito de Spa tiene todo con lo que sueña un piloto, increíbles curvas rápidas y ‘chicanes’ lentas y puede estar lleno de sorpresas por el tiempo. Puede llover en un minuto, y al siguiente brillar el sol», afirmó en declaraciones facilitadas por su escudería.
De todos modos, el líder del Mundial destaca la zona de ‘Pouhon’ como su favorita porque se pone «el coche en sexta» y después se quita un segundo el pie del acelerador y se entra en la curva «a más de 280 km/h». «La última ‘chicane’ es difícil porque el coche se va y tienes que estar concentrado para mantenerlo en la pista», añadió.
Por último, se mostró encantado por haber disfrutado de unos días de vacaciones en verano. «Ha sido genial tener un descanso en verano para relajarnos y hacer deportes acuáticos, pero estoy deseando volver a meterme en el coche», sentenció.
