Facundo Mallo fue una apuesta de Miguel Russo que llegaba con ciertas miradas de reojo. El defensor uruguayo traía pocos pergaminos y la desconfianza sobre su rendimiento tenía sustento. Pero en cinco fechas, el zaguero mostró personalidad, buen desempeño y un corazón enorme que ya le permitió ganarse el cariño de los hinchas canallas.
En conferencia de prensa, Mallo aseguró que el equipo viene en formación, y que si bien lo numérico es bueno, la escasa cosecha de puntos como visitante es un aspecto a mejorar urgente.
“El arranque del equipo se puede separar en dos partes, de local nos estamos haciendo fuertes y al rival le cuesta hacernos goles, pero de visitante tenemos que demostrar por qué estamos en debe en ese sentido. Creo que un punto de seis es poco. La diferencia está bastante clara”, sentenció Mallo, marcando la gran diferencia que muestra el equipo jugando en el Gigante.
“A mí me gusta ganar. Somos un equipo jodido de enfrentar para cualquier rival, plantamos cara y luchamos cada pelota; competimos. No es poco 10 puntos de quince, pero un punto de seis posibles de visitante sí es poco. Estamos en el debe en esa condición”, agregó.
La defensa canalla se afirma a partir de Mallo y Carlos Quintana, quienes empiezan a ser respetados por los hinchas. “Los defensores intentamos acompañar al equipo y con el correr de las fechas nos vamos conociendo, por eso creo que el equipo en general se va afianzando”, sostuvo.
Y agregó: “La fase defensiva no compete sólo a los defensores, sino también a los de arriba, cómo presionamos, cómo nos paramos. El juego se entiende mejor si la parte defensiva es de todo el equipo. Creo que en general hasta aquí tuvimos un buen rendimiento”.
Central visita a Sarmiento, una buena chance de mejorar los números fuera de casa. “Durante la semana venimos hablando de que Sarmiento es un equipo fuerte, que apuesta mucho a la segunda pelota, por lo que tendremos que estar atento a eso, no solo nosotros. Son fuertes, tienen delanteros de mucha estatura, por eso creo que va a ser un partido peleado, en el que nosotros apelaremos a nuestras armas”, explicó.
El fútbol uruguayo se caracterizó siempre por su potencia en la marca, pero Mallo destaca diferencias importantes con el argentino. “Todavía estoy acostumbrándome. La mayor diferencia está en el ritmo de juego, pero después es fútbol, donde se lucha como en todos lados”, comentó.
En cuanto a los elogios de los hinchas, el defensor prefirió transitar por zona de perfil bajo. “Yo simplemente intento hacer mi trabajo y colaborar con el equipo. Después, lo que opina el resto no me corresponde a mí decirlo. Entreno día a día para dar lo mejor y cada uno tendrá su opinión”, comentó.
¿Las virtudes del Central de Russo? Mallo tiene su punto de vista: “Creo que somos un equipo jodido para enfrentar porque peleamos mucho y no damos ninguna pelota por perdida. A partir de ahí, aun ganando, perdiendo o empatando intentamos corregir, pero sobre todo que el resultado del fin de cada partido no afecte el trabajo de la semana. En el vaivén que tiene el fútbol, un día ganás y sos el mejor, y cuando perdés, sos un desastre, pero nosotros sabemos que no es así”.
“Quiero que mi equipo sea sólido, que en la cancha haga lo que se trabajó en la semana y me parece que mucho de eso pasó en estos cinco partidos. Insisto, somos un equipo jodido, ponemos cara (una expresión bien uruguaya) y de ahí en más son detalles, que son los que terminan definiendo los partidos”, concluyó.