Sin embargo, un canadiense de origen paquistaní fue arrestado en el aeropuerto Arlanda de Estocolmo acusado de «preparación de sabotaje».
La alarma se declaró después de una llamada telefónica efectuada por una mujer a la policía canadiense, mientras el avión estaba en vuelo entre Toronto y Karachi, en la que afirmaba que un hombre llevaba a bordo explosivos.
El detenido no tenía ningún tipo de explosivos consigo, según los primeros controles.
«Ninguna sustancia peligrosa fue hallada hasta ahora» en la nave, dijo el portavoz de la policía, Kjell Lindgren, quien agregó que, de todas formas, seguirían las pesquisas a bordo del avión.
