Alicia Peralta, la madre de Marlene Franco, la joven víctima de femicidio ocurrido el 14 de mayo de 2016 en la localidad santafesina de Oliveros, presentó junto con los representantes de la querella el estado de la causa, en la que hay un joven de 20 años imputado.
“Vamos a seguir hasta las últimas consecuencias; será justicia para mi hija cuando el culpable reciba la condena”, reclamó Alicia.
En cuanto a la investigación, la abogada María Noel Severo, en compañía de sus colegas Juliana Tagliatti y Valentín Hereñú, indicó: “El objetivo claro de esta querella es incorporar la perspectiva de género en esta investigación. La familia se presentó como querellante desde agosto”.
La letrada agregó que tras la obtención de los resultados definitivos de las pruebas de ADN “estamos en condiciones de afirmar que hay varios indicios probatorios que comprometen al señor José O., hoy imputado en la causa y con prisión preventiva sin plazo”.
A su vez, las legisladoras Alicia Gutiérrez, Verónica Benas, Inés Bertero y Silvia Augsburger, integrantes de la Comisión de Derechos y Garantías de la Cámara de Diputados, estuvieron junto a la familia en la reunión realizada ayer a las 17 en el bar El Cairo.
La diputada Benas expresó que hay preocupación por la carátula de la causa. No es menor que no se incluya el femicidio a la calificación legal y se deje a una interpretación lo que ya está previsto en el código. Es importante que se acredite que fue un femicidio para continuar con la lucha contra la violencia de género”, remarcó Venas.
Gutiérrez hizo hincapié en dos cuestiones que tienen que pasar la mayoría de los familiares y las víctimas de violencia de género. “Más allá de los pasos obligatorios que llevan los análisis de ADN no puede haber tanto retraso para la familia”. Explicó que otro llamado de atención es el acompañamiento a los familiares de las víctimas, ya sea con asistencia psicológica o económica. expresó Gutiérrez presidenta de la Comisión.
Crimen a la madrugada
El caso se conoció a las 6.30 del 14 de mayo pasado, cuando un habitante de la cuadra de Mitre al 500 estaba por guardar el auto en el garaje de la casa de fin de semana de su vecino, quien le había dado permiso. El hombre advirtió que en el patio trasero había una joven tirada boca abajo. Al acercarse, vio que la muchacha estaba sin vida y desnuda de la cintura para abajo. Tras ello, el hombre llamó a la Policía de la Unidad Regional X, del departamento Iriondo.
Al lugar arribó personal de la Policía de Investigaciones (PDI), y criminalística. Bajo la supervisión del fiscal de San Lorenzo Leandro Lucente se dispusieron a recabar las pruebas en la escena.
De acuerdo con la investigación, la víctima, identificada como Marlene María del Rosario Franco, de 21 años, era oriunda de la ciudad entrerriana de Hasenkamp y hacía un año que vivía en Oliveros con su madre. Hacía poco tiempo que se había mudado, por lo que los vecinos no la reconocieron ni tampoco la Policía. Por la mañana, la madre de la joven se había acercado a la comisaría 12ª para denunciar que su hija había ido a bailar a Maciel, distante a 14 kilómetros, y no había regresado.
Esta versión coincide con los boletos que tenía la joven entre su ropa.
Más tarde un testigo contó que vio salir a un joven de la casa donde se encontró el cuerpo. Proporcionó la descripción física y los investigadores detuvieron a José Enrique O., de 20 años. Ya en sede policial, el sospechoso brindó su testimonio. En un principio, relató que estaba alcoholizado y no recordaba qué había hecho esa noche. Pero tras unos minutos reconoció la autoría del hecho frente a testigos, según fuentes del caso.