La guerrilla colombiana de las Farc quiere presentar un posible acuerdo de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos ante los presidentes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), según anunció la propia insurgencia en un mensaje difundido ayer en internet.
“Aunque el gobierno de Colombia mantiene cerrada la puerta del diálogo con la insurgencia acicateado por el espejismo de una victoria militar y la injerencia de Washington, queremos reiterar a la Unión de Naciones del Sur nuestra irreductible voluntad de buscar una salida política al conflicto”, señaló el grupo.
Las Farc emitieron un comunicado que fue publicado por el portal de internet de la agencia de noticias Nueva Colombia (Anncol), que suele presentar textos de la insurgencia.
Según las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), la región debe ayudar a buscar el camino hacia la paz, pues “la estrategia neoliberal, la violencia institucional y para institucional, han agravado a niveles insospechados el conflicto, haciendo muy difícil superar esta etapa de confrontación fratricida sin la ayuda de países hermanos”.
Las Farc insistieron en que estuvieron de acuerdo con una salida política al conflicto desde su fundación, en 1964, pero que los fracasos de procesos de paz en los gobiernos de los presidentes Belisario Betancur (1982-1986), César Gaviria (1990-1994) y Andrés Pastrana (1998-2002) obedecieron a que “las oligarquías no quisieron considerar ningún cambio en las injustas estructuras políticas, económicas y sociales que motivan el alzamiento”.
“Hoy enfrentamos, enarbolando incuestionables banderas políticas, la más grande maquinaria bélica que haya enfrentado guerrilla alguna, pero siempre luchando la posibilidad de una solución política. Señores presidentes: cuando lo estimen oportuno estamos dispuestos a exponer en una asamblea de Unasur nuestra visión sobre el conflicto colombiano”, concluye el mensaje de las Farc, reseñado por DPA.
El máximo líder del grupo armado, alias Alfonso Cano, dijo en un video divulgado el 30 de julio pasado que su grupo está dispuesto a conversar con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, que asumió el cargo el 7 de agosto último.
“Lo que estamos en disposición de analizar es hasta qué punto en Colombia necesitamos seguir combatiendo con las armas en la mano para que haya democracia y para poder abrirle paso a una nueva Colombia. Eso lo podemos discutir”, dijo Cano, un sociólogo cuyo nombre verdadero es Guillermo Sáenz.
Santos ha afirmado que su gobierno “no ha cerrado con llave la puerta de la paz”, pero que sólo dialogará con las Farc cuando ese grupo dé muestras de buena voluntad para negociar con actitudes como la liberación de los rehenes y la ruptura de vínculos con los narcotraficantes.
El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, almirante Edgar Cely, dijo la semana pasada que las tropas que persiguen desde hace varios meses a Cano en una zona del centro-oeste del país saben dónde se refugia, por lo que pronosticó una pronta captura.
“Esperamos darle esa alegría al pueblo colombiano. Estamos trabajando, es una cosa que requiere una cautela y un secreto muy especial para no dañar la operación, pero no descansaremos hasta que podamos generarle a Colombia una sensación de seguridad real y esta sensación la lograremos con noticias sobre el jefe guerrillero”, dijo Cely.
Según el gobierno, en 2002 las Farc tenían unos 20.000 miembros y ahora cuentan con cerca de 8.000, debido a las bajas en combate, las capturas y las deserciones.