El realizador Alexander Sokurov cierra, de la mano de Fausto, su “tetralogía del poder”, formada por las películas Moloch (1999), centrada en Hitler; Taurus (2001), sobre la figura de Lenin y El Sol, levantada alrededor de Hirohito.
Fausto es una versión libre de la obra de Goethe que se alzó con el León de Oro en Venecia. El mito de Fausto es una historia sobre cómo el deseo de poder puede hacer perder el alma ante el diablo y es por esto que, según indica el director, fue elegido para cerrar la saga sobre figuras que terminaron destruidas por su propio poder (Hitler, Stalin, Hirohito). En esta versión libre, Sokurov centró su relato en todo aquello que rodea al texto clásico, evadiendo los componentes trágicos de un hombre en deuda con el diablo y enfocándose en el día a día de un personaje anónimo impulsado por sus instintos básicos.
Salas: Showcase, El Cairo.