La intendenta Mónica Fein suscribió al histórico compromiso firmado ayer por alcaldes de todo el mundo y el Papa Francisco, durante el Coloquio internacional convocado por la Academia Pontificia de las Ciencias titulado “Esclavitud Moderna y Cambio Climático: el Compromiso de las Ciudades”. En el documento, los representantes de las ciudades más importantes y la autoridad máxima de la Iglesia Católica, reunidos en el Casino Pio IV en la Ciudad Vaticana, alertaron sobre estas dos problemáticas y se comprometieron a trabajar en conjunto.
«La Santa Sede puede hacer un discurso y llevarlo a las Naciones Unidas, pero no tiene efecto si no se trabaja desde las ciudades», sostuvo el Papa Francisco durante el coloquio, en el que instó a los alcaldes a hacer propia la responsabilidad de luchar contra el cambio climático y la trata de personas. “El trabajo más serio y más profundo, se hace desde la periferia hacia el centro. Es decir, desde ustedes hacia la conciencia de la humanidad. La Santa Sede o tal país, o tal otro, podrán hacer un buen discurso en las Naciones Unidas pero si el trabajo no viene de las periferias hacia el centro, no tiene efecto”, sostuvo.
En el documento, los representantes de cada localidad se comprometen a “reforzar en nuestras ciudades y asentamientos urbanos la capacidad de resiliencia de los pobres y de aquellos en situación de vulnerabilidad y reducir su exposición a los eventos extremos relacionados con el clima y otros impactos, y catástrofes económicos, sociales y medioambientales, que fomentan la trata de personas y los riesgos de la migración forzada” y a “terminar con el abuso, la explotación, la trata de personas y todas las formas de esclavitud moderna, que son crímenes de lesa humanidad”.
“Queremos que nuestras ciudades y asentamientos urbanos sean cada vez más socialmente inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles. Todos los sectores y todas las partes interesadas deberán desempeñar el papel que les corresponde: este es un compromiso al que cada uno de nosotros se suma plenamente ya como alcaldes ya como personas”, finaliza el histórico documento, al que suscribieron todos los presentes.